El Gobierno está nervioso porque ya nadie se cree su propaganda con los datos del paro. España es campeona en paro y subempleo en la Unión Europea y, por mucho que el Gobierno se empeñe en repetir la falacia del “récord de empleo”, la realidad es tozuda. No sorprende que se entregue el ministro a la descalificación personal cuando se desmonta su euforia con SUS PROPIOS DATOS, que califica de “falsos” e inventados. Fascinante.
¿Por qué le molestan sus propios datos al ministro? Porque la EPA y Eurostat ya han desmontado la propaganda de récord de empleo del Gobierno y los datos de abril, también.
La EPA mostraba la evidencia: tasa de empleo (porcentaje de ocupados con respecto a la población en edad de trabajar) en marzo 2018 era de 50,2%. La tasa de empleo en marzo 2023, último dato publicado, es 50,8%, y eso disparando la contratación pública financiada con deuda, que es un 55% del empleo “creado” desde la pandemia.
No hay récord de empleo cuando 20,6 millones de afiliados, 2,95% más que el año pasado, trabajan menos horas que 19,8 millones. Los datos del INE hasta marzo, último dato publicado, muestran que el número medio de horas efectivas semanales trabajadas por todos los ocupados ha caído con respecto al dato del cuarto trimestre de 2019. Todos ustedes recordarán como el presidente del Gobierno y varios de los ministros del Gobierno actual decían, cuando estaban en la oposición, que “no se crea empleo, se trocea” cuando las horas trabajadas caían. Pues eso, apúntenselo.
Desde 2019, más de la mitad del empleo “creado” (55%) es empleo público pagado con más deuda. Hay, además, 70.000 empresas cotizando menos que antes de la pandemia.
El paro cae en abril, pero continúa maquillado: no hay 2,8 millones de parados, hay 3.000.870 y 1.000.696 demandantes de empleo de esos que llaman “ocupados” según los propios datos del ministerio publicados el miércoles. Todos ustedes recordarán cómo el presidente del Gobierno y varios de los ministros del Gobierno actual decían, cuando estaban en la oposición, que el número de parados era mayor al oficial cuando los demandantes de empleo ocupados eran 70.000. Pues eso, apúntenselo.
El paro mejora en abril por la campaña de Semana Santa. Más de la mitad de la afiliación de abril es en hostelería. Todos ustedes recordarán cómo el presidente del Gobierno y varios de los ministros del Gobierno actual decían, cuando estaban en la oposición, que el empleo creado era precario de bajo valor añadido y por el turismo, no por el Gobierno. Pues eso, apúntenselo.
Triplicar la contratación indefinida reduciendo masivamente la duración media de los contratos no es un récord ni un hito
De los 1,1 millones de contratos firmados en abril, 630.000 son temporales. De los contratos “indefinidos” de abril, el 57,8% no lo son a jornada completa. De todos los contratos firmados, sólo el 11,7% son a jornada completa. Todos ustedes recordarán como el presidente del Gobierno y varios de los ministros del Gobierno actual decían, cuando estaban en la oposición, que un trabajo que no es a jornada completa es “precariedad disfrazada”. Pues eso, apúntenselo.
Todo, señor ministro, son datos suyos.
Hay 4.314.000 demandantes de empleo en abril de 2023. En junio de 2018, cuando llegó el Gobierno, había 4.470.000 demandantes de empleo totales. Todos ustedes recordarán cómo el presidente del Gobierno y varios de los ministros del Gobierno actual decían, cuando estaban en la oposición, que el número de desempleados real era el de demandantes de empleo, que reflejaba la precariedad del mercado laboral español. Pues eso, apúntenselo.
El número total de desempleados registrados en el SEPE es de 3.313.921, a lo que hay que añadir 14.975 trabajadores en ERTE. Estos son sus datos, ministro.
El 57% de los contratos indefinidos registrados en abril no son a jornada completa. Estos son sus datos, señor ministro.
Han hecho falta 28 contratos por cada nuevo afiliado en el último año hasta abril y la duración media de los contratos ha caído de 60 días en marzo de 2022 a 50 días en marzo 2023, último dato publicado. Estos son sus datos, señor ministro.
Triplicar la contratación indefinida reduciendo masivamente la duración media de los contratos no es un récord ni un hito.
España cerró 2022 con 3,03 millones de personas en paro, según Eurostat, y un 20,1% de desocupados e infraempleados, ya que Eurostat añade 1,07 millones de desempleados y 1,1 millones de subempleados. España es el país con la mayor tasa de paro de toda la Unión Europea en marzo, 12,8% oficial.
Efectivamente, España cerró marzo con una tasa de paro del 12,8% comparado con la media de la Unión Europea del 6% y la eurozona del 6,5%, según Eurostat, y en el segundo trimestre de 2022 con una tasa de holgura laboral (desempleo y subempleo) del 20% comparado con un 12,5% en la Unión Europea y 13,5% en la eurozona.
Sí, señor ministro. Los datos de empleo de España son atroces, especialmente cuando un 55% del empleo “creado” desde la pandemia es contratación pública que se financia con mayor deuda y un déficit estructural que es el segundo mayor de la Unión Europea. Sí, señor ministro, los datos son especialmente malos porque España es el país que más ha aumentado la deuda pública de la UE (el triple de aumento de deuda pública sobre PIB que la media de la UE y la eurozona, según Eurostat) tirando de eso que la vicepresidente económica llama políticas “neokeynesianas”.
Un país que es campeón de paro, de subempleo y de paro juvenil en toda la Unión Europea y la OCDE y que ha disfrazado esas malas cifras con empleo público como hizo Grecia antes de implosionar, jamás debería vanagloriarse de “récord de empleo”. Es un insulto para todos los españoles. Estoy seguro de que el día que dejen el Gobierno volverán a decir que la lacra del paro es el gran problema de España. Hasta entonces, que pasen un buen fin de legislatura.