"The lights go down and there’s no one around". Jeff Lynne.
El 'tope del gas' ha encarecido la factura de la inmensa mayoría de consumidores aunque disfrace el precio mayorista. No es más que un engaño que ya supone más de 600 millones de euros pagados a Francia por la subvención a costa de todos los consumidores y que ha disparado la factura del 80% de los consumidores que no tenían su electricidad contratada con la tarifa PVPC (regulada).
Según datos de Eurostat, la factura de la luz de los hogares españoles subió en agosto más del 60% respecto al mismo mes del año anterior, mientras que en Francia subió un 7,7%, un 16,6% en Alemania y un 32,1% en Portugal. Ojo, Portugal, con el mismo mecanismo de 'excepción ibérica' sufre una subida de casi la mitad que la española.
¿Por qué? Porque el Gobierno de España es el único que sigue negándose a ligar la tarifa regulada al mercado de futuros y la mantiene ligada al mercado diario, mucho más volátil y caro, y lo que ha hecho ha sido pasar el coste del gas por otro lado a la inmensa mayoría de consumidores.
Con el mal llamado 'tope del gas' y la peor llamada rebaja de impuestos ya plenamente en marcha, el recibo de luz de los hogares españoles es el que más sube tras Italia. Aumenta en España ocho veces más que en Francia y cuatro más que en Alemania, según Eurostat.
Este engaño intervencionista incentiva el uso de gas natural en la generación, al subvencionarlo garantizando el precio, regala millones a Francia y ha disparado la factura de los ciudadanos españoles.
Otro "éxito" –nótese la ironía- del intervencionismo gubernamental es que, al haber creado un conflicto diplomático con Argelia, el mayor suministrador de gas a España, también pagamos el gas natural mucho más caro de lo que deberíamos. Se han disparado un 40% las importaciones de gas natural licuado de Rusia cuyo precio es casi el doble que el precio al que se compraba el gas vía gasoducto.
[Sin noticias de cuánto nos costará el gas de Argelia]
En su factura verá que el coste del 'tope del gas' ha pasado de 180 euros por MWh a unos 212 euros. El consumidor español paga el 100% del coste de cualquier barco de gas natural licuado porque se compensa a las gasistas sea cual sea el entorno. El Gobierno ha eliminado el riesgo de negocio de los importadores de gas, regala 600 millones a Francia y pasa todo el coste al consumidor.
Este mecanismo es, además, injusto, ya que penaliza especialmente a los clientes de tarifa no regulada que no tienen la culpa de los errores del Gobierno, y a los que se les ha colado un gasto adicional por tope de gas que no tenían ni deberían tener. A medida que vencen los contratos cerrados de tarifa no regulada con caducidad abril de 2022 el nuevo "concepto" se suma a su factura.
¿Qué significa esto? Una factura real de 290KWh de consumo ha subido más de un 60% por el añadido del 'tope del gas'. Se ha añadido un coste de 212 euros por MWh elevando una factura de 110 euros a más de 183 euros.
En una factura real por consumo de 513KWh el coste del 'tope del gas' añadido artificialmente casi duplica la factura (79 euros por consumo y 73 por el mal llamado 'tope del gas').
Analizando un grupo de facturas reales recibidas, el extracoste por el 'tope del gas' se mueve entre un 42% y un 60%.
Analizando un grupo de facturas reales recibidas, el extracoste por el 'tope del gas' se mueve entre un 42% y un 60%
El precio de mercado sin el 'tope del gas' a 23 de septiembre habría sido 327 euros por MWh. Con el subterfugio es de 274 euros por MWh (149 euros Spot + 125 de pago de subvención). Supone una 'bajada' aparente del 16%, ¿verdad? No, a los clientes con contrato fijo, el 80% del total, les supone un incremento brutal (+125 euros por MWh) y un aumento de factura como los citados anteriormente.
Además, al cliente de tarifa regulada le sigue suponiendo una subida superior a la de cualquiera de los países comparables, incluido Portugal.
Encima, es un regalo para Francia. El total de renta a Francia por exportación de energía desde el 15 de junio hasta el 23 de septiembre de 2022 es de 616 millones de euros que paga usted.
El desastre intervencionista del Gobierno ha hecho que paguemos el gas natural mucho más caro por destruir las relaciones con Argelia, que le paguemos una subvención a Francia de 616 millones y que la factura eléctrica de los hogares españoles haya subido mucho más que la de Portugal, Alemania o Francia y la inmensa mayoría de los países de la Unión Europea.
[El intervencionismo eléctrico está destruyendo el mercado]
No olvidemos tampoco que "la bajada del impuesto de la luz" no ha generado ningún impacto en la recaudación. El Gobierno de España recaudará más de 11.000 millones de euros de la tarifa eléctrica incluso con esa bajada, ya que los impuestos encadenados y los ingresos por venta de derechos de emisión de CO2 -un impuesto encubierto- llevan a que los ingresos fiscales aumenten con respecto a 2021.
Dice el Gobierno que le molesta que se hable del coste del tope del gas cuando es "ahorro"… Pero no hay ahorro alguno, solo un desastre que ha empeorado las cosas para todos los consumidores mientras el estado sigue usando la tarifa como una máquina de recaudar.