Llegó a Moderna en 2018. Pero el camino hasta el puesto que hoy ocupa no ha sido fácil. Dejó su Cuba natal hace ya 15 años. "Desde niño he querido ser científico y crear una vacuna que salvase vidas". Un futuro que no era viable construir en su país. Su sueño, junto con el deseo de que sus dos hijas fuesen libres, le llevó salir de Cuba.

"Tardé diez años en preparar todo para poder escapar. Y lo hice solo, dejando atrás a mis hijas y con la responsabilidad de triunfar fuera". No fue hasta casi siete años después cuando Pajón pudo volver a verlas y sacarlas de Cuba. "Ahora son dos mujeres libres". Le brillan los ojos.

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Tras escapar de Cuba, fue a Canadá. Y de ahí, a Estados Unidos. "He estado en diferentes puntos del país hasta llegar a Moderna". Y, en 2020, estalló la pandemia de la Covid-19.

"En enero de 2020, cuando se publicó el genoma del virus, ya sabíamos que teníamos la herramienta fundamental para hacer la vacuna. Moderna creó un equipo para generar el antígeno lo más rápido posible. El trabajo empezó en febrero", cuenta. Rolando Pajón fue el encargado de crear todo el sistema de datos del laboratorio clínico. Y, nueve meses después, la vacuna contra la Covid-19 de Moderna estaba en el mercado. "Un hito histórico que conseguimos gracias a la colaboración de muchos actores", destaca.

Rolando Pajón durante la entrevista concedida a EL ESPAÑOL-Invertia. Jose Verdugo.

"Trabajamos a contrarreloj y con un sentido de la responsabilidad tremendo pues estaba muriendo mucha gente", prosigue.

"Pudimos hacer las fases de los ensayos clínicos en paralelo. La colaboración ha sido muy importante, sobre todo de las agencias regulatorias que han trabajado al mismo ritmo que la compañía". Pero "esto no quiere decir que haya sido un proceso menos riguroso, solo que fue más rápido", recuerda. 

Una vez que la vacuna estuvo lista "teníamos sentimientos encontrados porque contábamos con un antígeno, pero no había suficientes dosis", agrega. Y Moderna puso toda su maquinaria en marcha para "construir una buena capacidad de producción".

Para ello, firmaron diferentes acuerdos de colaboración. Entre ellos, con la farmacéutica española Rovi, que ha ayudado en esta ampliación de la fabricación. Y sigue haciéndolo. "Es una colaboración fundamental", dice.

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"Ahora contamos con una capacidad que es tremenda y está establecida en diferentes puntos del mundo. Hemos desarrollado una producción global y pensamos que es más que suficiente para suministrar las vacunas contra la Covid y el resto de productos de ARN mensajero en los que estamos trabajando", continúa.

Le preguntamos sobre la búsqueda de nuevos partners de fabricación, a lo que Pajón responde que "Moderna está constantemente revaluando cuáles son las necesidades del mercado". Sin embargo, puntualiza: "Nuestro objetivo es salvar vidas y eso conlleva más que producir la vacuna. Significa trabajar con los gobiernos, educar a la población, etc.".

Nueva vacuna

Tras la primera versión de la vacuna contra la Covid-19, Moderna ya tiene en el mercado la segunda. Se trata de un antígeno adaptado a la variante ómicron. "La nueva vacuna es bivalente. Es una sola dosis de refuerzo que tiene dos componentes: uno con la secuencia original y otro con la variante de ómicron", explica.

Es por esta razón por la que no seguirá los pasos de Pfizer de dejar de fabricar la primera versión. "No podemos dejar de producir la original, porque un componente de la nueva es todavía de la primera vacuna".

Rolando Pajón escapó de Cuba hace 15 años y ahora es scientific and medical director LATAM Head de Moderna. Jose Verdugo.

Pero el trabajo de la compañía no se detiene aquí. De hecho, ya mira hacia el futuro (algo que le gusta mucho a Rolando Pajón, según el mismo ha confesado) y trabaja en una vacuna combinada de Covid-19 y gripe. ¿La Covid será un virus del que haya que inmunizarse anualmente, como la gripe? -le preguntamos-. "Pensamos que es un escenario muy probable", responde.

Por ello, espera que "de tres a cinco años tengamos vacunas combinadas contra la Covid y la gripe". A esta "le seguirá otra que combine Covid, gripe y sincitial respiratorio. Tenemos grandes ambiciones", reconoce.

Cáncer

Moderna es una compañía farmacéutica que se dio a conocer por su vacuna contra la Covid-19. Pero no solo trabaja en coronavirus. "Tenemos un programa de desarrollo de una vacuna personalizada contra el cáncer", dice, orgulloso, Rolando Pajón. Y resalta la palabra 'personalizada', "porque cada paciente es diferente". 

Y no deja escapar la oportunidad de contar cómo se crea cada vacuna. "Una persona puede tener distintos tumores. Hacemos biopsias de esas lesiones y secuenciamos el genoma. Cuando identificamos la mutaciones, construimos un ARN. Eso se traduce en unas proteínas que reconoce el sistema inmune para que este desarrolle una respuesta inmune y así atacar las lesiones del cáncer".

Actualmente, el ensayo clínico de este producto está en fase II. Una etapa de la que esperan dar a conocer datos a finales de este año. "Será entonces cuando sabremos si estamos en la dirección correcta. Hasta ahora pensamos que sí". Una vacuna que puede que llegue al mercado. De hacerlo, "será un complemento a las terapias actuales".

Enfermedades respiratorias, cáncer, enfermedades raras... Son muchos los campos en los que trabaja Moderna. Y algunas de esas investigaciones pueden llegar a España en forma de ensayo clínico. "Somos conscientes del potencial de este país. Hay mucho talento. Es un lugar donde no podemos no estar", asegura.