Wall Street volvía a la actividad -tras el parón de Semana Santa- con tendencia mixta. El Dow Jones, a las puertas de los 40.000 puntos, retrocedía, mientras que el S&P 500 y el Nasdaq celebraban con avances las últimas cifras de inflación conocida, lo que suponía ampliar las subidas registradas en el primer trimestre del año.

Exactamente, el Dow Jones cedía un 0,21% en el inicio de la jornada de este lunes, hasta los 39.718 puntos. El S&P 500 sumaba un 0,11%, hasta los 5261,12 enteros, y el Nasdaq Composite, un 0,62%, hasta los 16.480,41.

Los principales índices de la Bolsa de Nueva York reaccionaban de forma dispar a la publicación del índice de precios de gastos de consumo personal (PCE, por sus siglas en inglés), que es el indicador favorito de la Reserva Federal (Fed) para medir la inflación.

Según las cifras publicadas el viernes, con Wall Street cerrado al ser festivo, el PCE se situó en febrero en el 2,5%, ligeramente por encima del 2,4% de enero. Sin embargo, en comparación mensual, la tasa se mantuvo en el 0,3%.

La variable subyacente, por su parte, se moderó una décima, hasta el 2,8%, en respecto al mismo mes de 2023.

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Además de a las mencionadas cifras de inflación, el parqué neoyorquino reaccionaba a las declaraciones que el presidente de la Fed, Jerome Powell, hizo el viernes. El banquero central reiteró que no tiene prisa por recortar los tipos de interés.

Durante un evento en California, Powell aseguró que no se tomará esa acción hasta que vea "lecturas de inflación mejores" y tenga más confianza en que los aumentos anuales de precios están cayendo hacia su objetivo del 2%, de acuerdo con Bloomberg."No necesitamos tener prisa por recortar", subrayó.

El presidente de la Fed, siempre cuidadoso con sus comentarios, sostuvo a principios de este mes que el organismo que dirige decidirá "con cuidado y consideración" cuándo bajan los tipos de interés. Esa decisión se tomará "en algún momento este año" cuando se tenga certeza de que la inflación se reduce de manera sostenida.

La publicación del PCE y las palabras de Powell han reforzado las expectativas del mercado sobre los tipos de interés. Los inversores dan ahora una probabilidad del 66% aun recorte de al menos 25 puntos básicos en junio. Antes de que se conocieran las cifras de inflación esas posibilidades eran del 55%, según la herramienta FedWatch del CME Group.

Nuevo trimestre

Con todo, Wall Street iniciaba un nuevo trimestre con ciertas dudas, tras haber comenzado 2024 en verde. Entre enero y marzo de 2024 el Dow Jones subió un 5,6%. Se trató de su mejor primer trimestre desde 2021.

En el mismo plazo, el S&P 500 avanzó un 10,2% en su mejor comienzo de año desde 2019, mientras que el Nasdaq Composite ganó un 9,1%.

Sólo en marzo, el S&P 500 subió un 3,1%; el Nasdaq un 1,8% y el Dow Jones 2,1%. De esta forma, los principales índices de Wall Street sumaron su quinto mes consecutivo al alza.

Los datos que se conozcan durante los próximos días pueden influir en el devenir de Wall Street en este inicio del segundo trimestre. Este martes se publicará la encuesta de ofertas de trabajo y rotación laboral (JOLTS), mientras que el miércoles será el turno del dato de empleo de ADP y el jueves el de las peticiones semanales de desempleo. El informe de empleo oficial de marzo se conocerá el viernes.

La agenda económica también incluye otras referencias destacadas como el PMI y el ISM manufacturero y el PMI y el ISM servicios.

Tras el toque de campana de este lunes, las mayores subidas del Dow Jones eran las de Intel (+2,09%), Microsoft (+1,3%) y Amazon (+1,09%). Por el contrario, las mayores caídas eran las de Amgen (-1,1%), Nike (-1,09%) y Merck (-0,88%).

Más allá de los componentes del selectivo de Wall Street, destacaban las subidas de la mayoría de fabricantes de chips. Micron Technology, Advanced Micro Devices y Marvell Technology avanzaban entre un 0,7% y un 1,2 %.

Spirit Airlines ganaba un 2,9% después de que la aerolínea de bajo coste haya comunicado que recibiría un crédito mensual de International Aero Engines hasta finales de 2024 como compensación por no poder operar sus aviones con problemas de motor.

UPS subía un 1,9%. La mayor empresa de entrega de paquetes del mundo se convertiría en el principal proveedor de carga aérea del Servicio Postal de Estados Unidos, un papel que hasta ahora ejercía FedEx.

Por el contrario, AT&T restaba un 2,7%. La operadora se veía perjudicada por la filtración en internet de los datos de más de 73 millones de cuentas de usuarios.