El fabricante chino de teléfonos inteligentes Xiaomi ha comenzado a despedir trabajadores en varias unidades de su negocio de servicios de Internet y teléfonos inteligentes. Así, la compañía está reduciendo su fuerza laboral en aproximadamente un 10%, según ha informado este martes. 

"Recientemente Xiaomi ha implementado una rutina de optimización de personal y eficiencia organizacional, que ha afectado a menos del 10% de los empleados. Los empleados afectados han sido compensados siguiendo legislaciones locales", han confirmado fuentes de la empresa.

Desde la filial española han incidido en que esta optimización de su fuerza laboral ha tenido lugar únicamente en China. "En nuestro mercado, seguiremos operando tal y como lo hemos estado haciendo hasta ahora", han subrayado.

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El periódico de Hong Kong South China Morning Post  adelantó este martes que las plataformas de redes sociales de China, incluidas Weibo, Xiaohongshu y Maimai, se habían inundado con publicaciones de empleados afectados por estos recortes laborales, según recoge la agencia Reuters.

Estos despidos afectan a miles de trabajadores, muchos de los cuales acaban de unirse a la empresa durante una ola de contrataciones que comenzó en diciembre del año pasado. De hecho, la propia compañía informó el pasado mes de septiembre que tenía 35.314 empleados, de los cuales 32.000 residían en China continental.

Sin embargo, las restricciones de China por la Covid-19 y la disminución de la demanda de los consumidores ocasionaron que el fabricante registrara una caída del 9,7% en los ingresos del tercer trimestre, según informó la compañía el pasado mes de noviembre.

Además, los ingresos de los teléfonos inteligentes, que representan aproximadamente el 60% de sus ventas totales, cayeron un 11% interanual.

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De esta forma, Xiaomi se suma a las empresas tecnológicas que están ajustando su plantilla. Antes del fabricante chino, la estadounidense HP Inc. también notificó que tiene previsto despedir a entre 4.000 y 6.000 personas en los próximos tres años.

Amazon, Meta, Twitter o Snap fueron las primeras empresas tecnológicas que anunciaron una oleada de recortes de personal que han afectado, como mínimo, a más de 120.000 trabajadores en todo el mundo.