La directiva europea contra el 'greenwashing', a falta de medidas concretas que lo definan, según los expertos
La norma incluye nuevas obligaciones como la prohibición de omitir información o de publicar la que no sea verdadera, hay que basarse en datos.
9 julio, 2024 17:36El Ilustre Colegio de la Abogacía de Madrid (ICAM) ha acogido el Foro de Expertos Confilegal, titulado 'Greenwashing: consecuencias de la nueva directiva europea', centrado en el impacto que tendrá la Directiva Europea 2024/825 para proteger a los consumidores de prácticas contrarias a la transición ecológica.
Durante el acto todos los expertos reconocieron que es importante poner cuanto antes medidas que permitan avanzar en la regulación, y terminar, con el greenwashing.
El acto fue inaugurado por José Ignacio Monedero, secretario de la Junta de Gobierno del ICAM. La mesa de expertos estuvo compuesta por la abogada asociada sénior de ESG de Herbert Smith Freehills, Leonnie Timmers, el miembro de Creatives for the Future, Nico Ordozgoiti, la periodista de EFE Verde Marta Montojo, y el director de Consumidor Global, Alejandro Tercero.
En la actualidad el greenwhasing es considerado una práctica desleal, que acarrea sanciones económicas muy gravosas para las compañías que incurren en este tipo de prácticas. Pero no solo es dañino para los consumidores, sino que también perjudica a aquellas empresas que realmente han implementado prácticas sostenibles a su modelo productivo.
En Europa varios países y ciudades ya han atajado con normativa propia el greenwashing y han impuesto sanciones específicas y prohibiciones a empresas, algo que otros países del mundo tienen aún más desarrollado. En España también hay causas abiertas pendientes de resolución, según han destacado los participantes durante el debate.
Al comenzar el evento, Leonnie Timmers admitió que "en Europa nos gusta mucho regular", y que por eso ya existe una abundante legislación sobre la materia. Sin embargo, la norma incluye nuevas obligaciones que a su juicio son fundamentales: la prohibición de omitir información material o de publicar aquella que no sea verdadera, la obligación de respaldar las informaciones sobre sostenibilidad basándose en datos.
Y también el añadido de un listado con prácticas desleales. Timmers confía en la legislación, pues al aumentar los requisitos "cada vez es más difícil hacer greenwashing".
Por su parte, Ordozgoiti apuntó que hoy en día "ya no es tan fácil vender la moto al consumidor", y engañar a la sociedad podría perjudicar a la empresa responsable. Las grandes marcas y la publicidad ejercen a su modo de ver una importante influencia social.
Por tanto, no tiene sentido que estas vayan rezagadas con respecto a la legislación, sino que deberían adelantarse a la misma. El creativo planteó al público si las energéticas estarían «buscando retrasar la transición a las energías renovables», a pesar de contar con iniciativas verdes.
"No concienciados"
La normativa hasta ahora vigente ha resultado insuficiente, dicen los expertos, pues en los últimos 20 años apenas se han retirado unas pocas campañas de publicidad engañosa en materia de sostenibilidad medioambiental. Es por esto que Marta Montojo se mostró igualmente optimista con la nueva regulación, pues para ella "hay mucho greensawhing" en la actualidad.
La periodista comentó también que se muestra positiva con respecto a la sociedad, asegurando que percibe una "respuesta y concienciación social".
Pero Alejandro Tercero no cree que la situación sea tan positiva. Cuando Berbell le preguntó si para él existe realmente una conciencia ciudadana sobre el greenwashing, Tercero afirmó que los consumidores "no están especialmente concienciados".
Este basa su punto de vista en las investigaciones realizadas por Consumidor Global, así como en las quejas que muchos usuarios manifestaban a la plataforma. "El consumidor incluso asume que los mensajes que oye son falsos", concluyó Tercero. Ordozgoiti se mostró de acuerdo con esta visión, ya que para él la sociedad desconfía enormemente de la publicidad, en general.
Para terminar el encuentro, Berbell consultó a los expertos si la nueva directiva hará la vida del ciudadano europeo más sencilla, o si se traducirá en complicaciones para las empresas. Todos ellos coincidieron en que los cambios que introduce la misma son imprescindibles. Las declaraciones de Alejandro Tercero resumieron la opinión general de los participantes del Foro: "La nueva directiva hará que las empresas sean responsables. Muchas no hacen greenwashing a posta, ya que se trata de un tema complejo, pero esta regulación podrá ayudarles".