La construcción del hidrogenoducto H2Med empezará a primeros de 2026 y durará cuatro años
El siguiente paso es conseguir la financiación necesaria para comenzar a definir el detalle de los trabajos de diseño e ingeniería.
1 agosto, 2023 02:43El hidrogenoducto H2Med se puede convertir en el primero de su especie en el mundo. Hasta la fecha no existe en el planeta ninguna infraestructura de su envergadura (455 kilómetros), que se haga offshore (es decir, vaya por el mar [submarino]) y sólo tenga como objetivo transportar hidrógeno verde. Su principal promotor, Enagás prevé comenzar las obras a principios de 2026 para que entre en operación comercial en 2030, según un documento al que ha accedido EL ESPAÑOL-Invertia.
El plan sigue adelante no sólo por interés estratégico de la Unión Europea (UE), sino también de Alemania. "Es muy difícil que un cambio político paralice un proyecto de esta envergadura", explican a EL ESPAÑOL-Invertia fuentes cercanas al proyecto.
"Lo quiere y lo necesita Alemania, así que Bruselas se buscó la mañas para que cumpliera los requisitos para entrar en el listado de PCIs, Proyectos de Interés Común. De hecho, fue el último del ránking. Con el H2Med se cerró la lista", confirman dichas fuentes a este diario.
Los proyectos de interés común son proyectos de infraestructuras energéticas transfronterizas claves para construir un mercado interior de la energía en la UE más integrado y resiliente. Para que un proyecto pueda recibir el sello de PCI debe tener un impacto significativo en los mercados energéticos y en la integración del mercado en al menos dos países de la UE, impulsar la competencia en los mercados energéticos y ayudar a la seguridad energética de la UE.
"Los alemanes saben que dos tercios del hidrógeno verde que va a requerir su industria para sustituir al gas natural lo tienen que importar. Han calculado y les saldría más caro hacerlo en el país que comprarlo de otros como España, que cuenta con un precio de las energías renovables mucho más barato gracias a la fotovoltaica", subrayan las fuentes.
"Ahora ya se ha aprobado como proyecto PCI pero se tiene que abrir otra ventana, la de los fondos CEF (Connecting Europe Facility)", continúan las mismas fuentes. Los CEF son un instrumento de financiación clave de la UE para promover el crecimiento, el empleo y la competitividad a través de inversiones específicas en infraestructuras a nivel europeo.
"La idea es que se consiga hasta el 50% de los costes de construcción y se adjudiquen los fondos CEF-E para construcción a finales de 2025", puntualizan.
Búsqueda de inversores
"El paso previo a comenzar las obras es cerrar la toma de decisión de inversión, el FID (Final Investment Decision), es decir, con qué dinero cuentas para poder iniciar el detalle de la ingeniería", inciden.
El operador español de la red de gas natural Enagás comenzará a recopilar datos sobre la oferta y la demanda de hidrógeno a medida que avanza con los planes para los gasoductos de hidrógeno nacionales e internacionales.
Para ello, la compañía lanzará una call de interés no vinculante el 14 de septiembre y así comprender quiénes son los principales clientes y proveedores potenciales de su red troncal de hidrógeno española planificada, según adelantó la pasada semana Arturo Gonzalo Aizpiri, consejero delegado de la compañía.
Hablando con los analistas después de la presentación de los resultados del primer semestre, Gonzalo informó sobre el progreso en los esfuerzos para asegurar las ayudas de la UE por valor de miles de millones de euros para proyectos de gasoductos de hidrógeno que conectan la península ibérica con Francia y Europa Central.
[La interconexión eléctrica por el Golfo de Vizcaya: un cable a ninguna parte]
Enagás estima que el proyecto H2MED costará alrededor de 2.500 millones de euros, sin incluir un hidrogenoducto a Portugal. Los costes no cubiertos por los fondos de la UE serán compartidos por los operadores de los países implicados. En total, se estima que costaría unos 4.600 millones de euros.
"El H2Med está en fase de prefeasibility study (PFS), es decir, en un análisis inicial del potencial proyecto, con aspectos como la ruta o el trazado, las características técnicas, el tipo de acero, el grosor, el número de compresores, etc. Estos estudios son realizados por un pequeño equipo y están diseñados para que Bruselas tenga la información básica que necesita para elegirlo como estratégico", continúan las mismas fuentes conocedoras.
"En cuanto se cierre la financiación, habrá que definir cada detalle del proyecto. Pero quizá lo más difícil de todo el proceso será poner de acuerdo a Francia, Alemania y a España en el CBCA (Cross-Border Cost Allocation), es decir, en el reparto de los costes de inversión eficientes de un PCI entre los países que se ven significativamente afectados por los proyectos", añaden.
"Ya sabemos lo bien que negocia Francia el reparto de los costes, no hay más que ver lo que ha pasado con la interconexión eléctrica del Golfo de Vizcaya", apostillan.
El regulador alerta del sobrecoste
La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), por su parte, ya ha dado la voz de alarma. Alerta de posibles "sobreinversiones" en el proyecto ante la falta de certeza sobre su demanda potencial.
Así lo afirma el regulador europeo (ACER) en un análisis de las 358 inversiones en infraestructuras gasistas que se prevé se realicen en la próxima década en Europa.
"La CNMC está preocupada por posibles sobreinversiones, ya que no sabemos (ni tenemos certeza) la demanda esperada que abastecerá los proyectos", señalaba la organización que dirige Cani Fernández en sus comentarios.