La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha abierto una investigación sobre las cuatro comercializadoras que ofrecen la tarifa de gas regulada para saber si están poniendo trabas para que sus clientes se acojan a ese precio, topado por el Gobierno y más reducido que los del mercado libre.
Así lo ha anunciado la secretaria de Estado de Energía, Sara Aegesen, en una entrevista en RNE recogida por EFE. La secretaria ha detallado que la CNMC ha abierto un expediente informativo ante la "avalancha" de solicitudes por parte de consumidores -especialmente de comunidades de vecinos con calefacción centra por gas- para cambiar a tarifas reguladas.
Naturgy, Endesa, Iberdrola y TotalEnergies están obligadas a comercializar esa tarifa, conocida como Tarifa de Último Recurso (TUR), pero a lo que los servicios de atención al cliente no pueden hacer frente, dada la elevada demanda.
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Desde que el Gobierno aprobara una nueva TUR para que las comunidades de vecinos se puedan acoger a ella, las peticiones de cambio de tarifa se han multiplicado, puesto que desde la invasión rusa de Ucrania el precio del gas se ha disparado.
El Ministerio para la Transición Ecológica ha constatado ese aumento de peticiones y teme que la "avalancha" de solicitudes de cambio a la tarifa regulada previsiblemente crecerá aún más en las próximas semanas, a las puertas de un invierno que se presenta "complicado".
Según la OCU, el coste anual con la tarifa TUR para un hogar medio que utiliza el gas como calefacción y tiene un consumo de 9.000 KWh anuales es de 723 euros. En cambio, en la mejor de las tarifas del mercado libre ese importe asciende a los 1.516 euros. La CNMC dispone en su página web de un comparador de precios.