Alerta roja en la industria: en España paran Acerinox y Fertiberia y en la UE anuncian la 'deslocalización'
Más de 30 empresas metalúrgicas de Europa han enviado una carta a Bruselas sobre la "amenaza existencial" por la emergencia energética.
9 septiembre, 2022 03:49La industria española vuelve a echar el freno por los altos costes de la luz y el gas. Acerinox ha detenido su acería, Fertiberia ha parado la producción de amoniaco y urea en su planta de Palos de la Frontera (Huelva) y ArcelorMittal está negociando un ERTE tras la parada de su alto horno en Gijón.
No es la primera vez que paran estas empresas. Los fabricantes de acero inoxidable ya paralizaron en marzo su acería en Algeciras (Cádiz), la única con la que cuentan en España. En esta ocasión, lleva sin actividad desde mediados de agosto cuando se detuvo por una parada técnica.
Una vez concluidas las tareas de mantenimiento, se ha decidido que por el momento no reanude su actividad. Desde el 1 de septiembre, unos 300 trabajadores están acogidos a ERTE y se prevé que, en los próximos días, esta cifra aumente a medida que se vayan deteniendo otras áreas como laminación en caliente y, posteriormente, laminación en frío. El grupo cuenta con 1.850 empleados en esta fábrica y el ERTE acordado les permitirá cobrar el 85% del sueldo.
El motivo de la parada es el alto coste de luz. Acerinox pagó en 2021 "un total de 90 millones más que el año anterior" y solo en el primer semestre de 2022 ha pagado "100 millones más que de enero a junio del año pasado", según han explicado fuentes de la compañía a EL ESPAÑOL-Invertia.
A pesar de este gasto, la compañía obtuvo en la primera mitad del año sus mejores resultados semestrales de su historia con un beneficio que alcanzó los 609 millones de euros.
Sin urea ni amoniaco en Fertiberia
Fertiberia ha detenido su producción de urea y amoniaco en Palos de la Frontera (Huelva) ante el alto precio del gas natural, que se ha multiplicado "por más de diez veces". Esta es su principal fuente de energía y de continuar con la actividad las pérdidas podrían ascender "a dos millones de euros mensuales".
Es la tercera vez que la productora de fertilizantes altera su producción en el último año. En marzo, cesó la producción de urea durante unas semanas en su planta onubense. En el otoño pasado, decidió interrumpir su actividad durante dos meses en Palos y extender una parada que tenía programada en Puertollano (Ciudad Real).
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En esta misma semana, ArcelorMittal ha reunido a los sindicatos plantear un ERTE en todo el grupo después de que su alto horno en Asturias haya detenido su actividad ante una menor demanda del acero en Europa. La decisión no se debe en este caso al precio de la luz, sino a "una menor demanda por la alta inflación, los costes energéticos de los clientes y las importaciones de terceros", precisan desde la compañía.
Otras empresas como Pamesa han podido sortear esta subida de costes con diferentes fórmulas. En el caso de este fabricante de cerámicas se ha optado por incluir una "tasa energética". Desde mayo, los clientes pueden consultar qué coste extra se aplicará a los azulejos para compensar el gasto del gas.
Alerta en toda Europa
Y mientras para la industria electrointensiva y gasintensiva en España, en el resto de países europeos la situación no es menos dramática. Tanto es así que representantes de toda la industria europea (más de 30 grupos industriales) han escrito a la Comisión Europea solicitando la rápida imposición de un tope a los precios del gas y su desvinculación de las tarifas eléctricas.
La carta, firmada también por la asociación europea de fabricantes de acero Eurofer, subraya que los precios del gas alcanzaron su punto máximo recientemente a un nivel 15 veces superior a las tasas anteriores a la crisis. También indica que los precios europeos son diez veces más altos que en EEUU, así como por encima de los precios asiáticos.“Está claro que se pierde la relación con un mercado normal”, explica la carta.
“En el contexto del discurso del Estado de la Unión del 14 de septiembre y antes del Consejo Extraordinario de Energía del 9 de septiembre, hacemos un llamamiento a la Unión Europea para que introduzca con urgencia medidas en toda la UE destinadas a limitar el precio del gas natural y también medidas diseñadas para desconectar los precios de la electricidad de los precios del gas".
"El marco de ayuda estatal de crisis temporal también debe ajustarse a esta nueva realidad”, concluye la carta.
"Algunas siderúrgicas han cerrado sus plantas y la metalúrgica va detrás, incluso ya se está importando productos de Francia porque allí se mantienen los precios bajos a la industria", señala a EL ESPAÑOL-Invertia Fernando Soto, director general de AEGE (Asociación de Empresas con Gran consumo de Energía).
Incluso se está moviendo plantilla de los horarios nocturnos a los diurnos porque ahora, con el precio del gas disparado y los ciclos combinados a pleno pulmón, por la noche, que era el horario más barato para la industria, ya no se puede producir.
"Los ERTE que está anunciando el sector industrial son solo medidas previas al cierre si no se revierte la situación. Solo pedimos tener los mismos contratos competitivos respecto a nuestros competidores, Francia y Alemania", concluye el responsable de la patronal. Pese a que toda Europa vive una crisis energética sin precedentes, el efecto sobre la industria española está siendo mucho más dramático. Al menos, por ahora.