El presidente de Iberdrola, Ignacio Galán, ha pedido un marco estable para las energías renovables y ha urgido a acelerar la transición energética debido a que las medidas que ralenticen este proceso "tendrán costes muy importantes", en concreto, la compañía estima que en España "podría equivaler a casi el 8% del producto interior bruto (PIB)".

Así se ha expresado Galán en un panel dentro de la reunión anual del Foro Económico Mundial que se celebra en Davos (Suiza). Allí también ha defendido una economía electrificada con energías verdes, el impulso "masivo" de las renovables, mayor inversión en redes inteligentes, un incremento del almacenamiento y una aceleración del desarrollo del hidrógeno verde en los sectores difíciles de electrificar.

"La transición no solo reducirá la dependencia exterior a los combustibles fósiles y los costes energéticos, sino que contribuirá a mejorar la seguridad energética, ya que las fuentes serán locales e infinitas, tendrá beneficios ambientales y contribuirá al desarrollo industrial y del empleo", ha argumentado.

En cuanto a la aceleración de este proceso, Galán ha recalcado que para ello es necesario "voluntad política" y ha recordado que las inversiones en energías limpias tienen "largos periodos de amortización", por lo que los inversores necesitan señales sólidas para dirigir su capital a los entornos más favorables.

"Tenemos tecnología, el apoyo de la sociedad y, como empresas, estamos dispuestas a desempeñar nuestro papel, invirtiendo y comprometiendo todos nuestros recursos humanos y tecnológicos, pero necesitamos claridad, Estado de derecho y una regulación atractiva", ha matizado.

Galán también ha hecho hincapié en que se necesitan procedimientos administrativos más sencillos para los proyectos de energías limpias y considerarlos de interés público.