Repsol lanza una plan de financiación sostenible para su proceso de descarbonización
Es la primera compañía de su sector en el mundo que presenta un marco financiero innovador que alcanza a todas las actividades de la compañía.
14 junio, 2021 13:31Noticias relacionadas
Repsol ha lanzado una estrategia integral de financiación sostenible para acompañar a su proceso de transición energética, convirtiéndose en la primera compañía de su sector en el mundo que presenta un marco financiero innovador que alcanza a todas las actividades de la compañía.
Según informó la energética, este marco integral incorpora tanto instrumentos destinados a la financiación de proyectos específicos (verdes y de transición), como los vinculados a compromisos sostenibles de compañía (SustainabilityLinked Bonds o SLB, en sus siglas en inglés).
El grupo presidido por Antonio Brufau destacó que así da "un paso fundamental" para seguir avanzando en su compromiso de ser una compañía cero emisiones netas en 2050. También indicó que esta estrategia integral de financiación sostenible, que ha sido verificada y certificada por la agencia de calificación ISS, está en línea con su plan estratégico 2021-2025. Esto permite el acceso a los recursos financieros necesarios para su implementación y contribuyendo a que la compañía siga liderando la transición energética dentro de su sector.
Los tres tipos de instrumentos financieros incluidos en esta estrategia integral se dividen en dos categorías. La primera de ellas es la de bonos o instrumentos de financiación de uso dedicado, que incluyen bonos verdes y de transición, ambos sujetos a los Principios de Bonos Verdes de la Asociación Internacional de Mercados de Capital (ICMA, en sus siglas en inglés).
Los fondos obtenidos con los primeros se destinarán a la financiación de proyectos elegibles de acuerdo con la taxonomía de la Unión Europea (energía renovable e hidrógeno renovable entre otros).
Por su parte, los fondos procedentes de los instrumentos de transición serán asignables a actividades y proyectos adicionales que también contribuyen a los objetivos sostenibles y forman parte de la estrategia de transición energética de Repsol.
La segunda categoría es la de bonos o instrumentos financieros cuyas condiciones económicas están ligadas al cumplimiento de objetivos clave de sostenibilidad de Repsol como compañía.
Estos bonos (SLB) están sujetos a los Principios de Bonos Vinculados a la Sostenibilidad de ICMA. Para su seguimiento, se fijará como indicador verificable el Indicador de Intensidad de Carbono definido por la compañía que mide las emisiones de CO2e por unidad de energía que Repsol pone al servicio de la sociedad (g CO2e/MJ).
Esta estrategia está así en línea con el objetivo fijado por la compañía dirigida por Josu Jon Imaz de llegar a ser una compañía cero emisiones netas en 2050 que incluye metas ambiciosas de reducción de emisiones, con una disminución de la intensidad de carbono del 12% para 2025, del 25% para 2030 y del 50% para 2040.
En este proceso, la compañía ha sido acompañada por HSBC y Natixis, que han actuado como asesores (Sustainability Structuring Advisors en inglés).
La asignación de fondos y los avances ambientales asociados a los compromisos que se adquieran se reportarán anualmente después de ser auditados.
Cero emisiones netas
En diciembre de 2019, Repsol fue la primera compañía de su sector en anunciar el compromiso de convertirse en una compañía cero emisiones netas en 2050, alineada con el Acuerdo de París y los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas.
En noviembre del año pasado, el grupo presentó su nueva 'hoja de ruta' 2021-2025, que recoge inversiones por 18.300 millones de euros a lo largo del periodo y un 30% del total, 5.500 millones de euros, se destinará a iniciativas bajas en carbono.
En su compromiso con la sostenibilidad, en 2017 Repsol fue la primera compañía de su sector en emitir bonos verdes certificados para reducir su huella de carbono, con una emisión a cinco años por importe de 500 millones de euros.
Los proyectos de eficiencia energética y de tecnologías de bajas emisiones implementados con estos fondos han ayudado a reducir emisiones por valor de 1,2 millones de toneladas de CO2e en tres años.
Actualmente, el 34,1% del accionariado institucional de la compañía está alineado con los criterios ESG (Environmental, Social, and Governance). Las buenas prácticas de Repsol han sido reconocidas, entre otros, por la iniciativa 'Climate Action 100+'.