Frutas y verduras.
Los alimentos cuestan cuatro veces más en el supermercado que en el campo: el ajo o la zanahoria, un 500% más
El agricultor recibe 0,79€ por un kilo de ajos, que luego se vende a 5,91. Los de temporada y los más perecederos son los que más se revalorizan.
7 septiembre, 2022 02:28El precio de las frutas y las verduras se multiplica por cuatro desde que salen del campo hasta que llegan al estante de un supermercado. Un encarecimiento que afecta a todos los productos, pero que se ceba especialmente con aquellos alimentos de temporada y con los más perecederos: el ajo sube un 648%, la zanahoria un 563% y la lechuga un 553%.
De media, el agricultor percibe 0,79 euros por un kilo de ajos, que luego se vende a 5,91 euros en los supermercados, según el índice de precios en origen y destino de COAG de agosto. En el caso de la carne, el precio final en el octavo mes del año fue casi tres veces superior al que se pagó al ganadero.
Los alimentos más caducos son los más afectados por este encarecimiento, ya que ante el deber de darles salida con premura se venden a un menor precio. En concreto, los ajos multiplican por siete su coste, las lechugas o zanahorias por seis y los repollos, calabacines y patatas por cuatro.
Las frutas de hueso se disparan
En la frutería, las mayores subidas se dan en las frutas de hueso. La ciruela se paga de media a 0,54 euros al agricultor, frente a su precio medio en agosto de 3,46 euros el kilo. Otras también multiplican su precio casi por cuatro: el melocotón se encarece un 269% y la nectarina un 273%.
La sandía y el melón se han pagado en origen a 0,46 y 0,37 euros el kilo, frente a su revalorización en los 'súper', donde ha alcanzado un precio medio de 1,49 y 1,28 euros por kilo. Aunque ahora la subida es 'solo' del 246% en el caso del melón y del 224% en el de la sandía, la revalorización de estas frutas ha superado el 500% durante los meses de verano, justo cuando se da una mayor producción de las mismas.
La ternera de 5 a 19€
En la carnicería, el coste de los productos se multiplica de media un 2,81. La ternera es la carne que presenta una mayor revalorización. Al ganadero se le paga cinco euros el kilo, mientras que en los lineales se vende a 18,99 euros.
El cerdo y el cordero multiplican su precio por tres y el pollo y el conejo por dos. En el caso del porcino, se paga 1,75 por kilo en origen, frente a una media de 6,29 euros en destino.
Cartón de huevos.
La leche sube su precio en un 98%, pasando el litro de 0,42 a 0,83, mientras que los huevos son uno de los productos que menos se revalorizan. La docena se paga a 1,42 en origen y en destino sube solo a 1,89 euros.
El pódium de productos más revalorizados va cambiando mensualmente, aunque el ajo lleva más de medio año como la hortaliza que más se encarece. En los meses de primavera, los precios que más oscilaron entre origen y destino fueron los de los limones, mandarinas, manzanas o naranjas.
Ante estas oscilaciones en los precios y la inflación actual, la ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, ha abierto abierto el debate para regular los precios de los alimentos.
"Ahora salen perjudicados tanto el agricultor como el consumidor, pensamos que hay margen para actuar en algunos productos, aunque no sabemos si poner un tope puede ser la solución", explica a EL ESPAÑOL-Invertia el responsable de mercados agrarios de COAG, Andoni García.
Cabezas de ajo, un producto que lleva medio año con una gran diferencia entre su precio en origen y en destino.
Una de las medidas adoptadas por el Gobierno para evitar que los agricultores vendan a pérdidas fue la aprobación de la Ley de la Cadena. Una normativa que no evita que se pueda vender por debajo del coste de producción, pero que sí se ha convertido en un instrumento para denunciar e inspeccionar estas prácticas abusivas.
"Es lícito y necesario que haya un debate sobre el acceso a los alimentos por parte de la población", aseguran desde COAG. Al mismo tiempo, advierten de que ese posible tope "no puede ser a costa de que se reduzca aún más a los agricultores".
[Los alimentos llevan cinco meses cayendo, pero todavía están un 8% más caros que hace un año]
Otra de las peticiones del campo es que se cree un Observatorio de Precios de los Alimentos del Ministerio de Agricultura para que "haya transparencia en los mercados" y "se pueda actuar ante los abusos".
Este es un instrumento que la Unión de Pequeños Agricultores (UPA) lleva años reclamando. A esta organización la medida de Díaz le parece "distópica", pero sí cree que debería aumentar la transparencia entre el beneficio del transportista, el almacenista y la distribución.
Por su parte, los distribuidores y supermercados se han mostrado abiertos al diálogo, aunque consideran que la solución debe contemplar medidas que palien los altos costes que también soporta este sector.
