En el plano económico, los datos son casi de récord. La cadena textil ha registrado un beneficio neto de 3.243 millones de euros al cierre de su año fiscal 2021-2022 (del 1 de febrero de 2021 al 31 de enero de 2022). El grupo cerró con unas ventas de 27.716 millones de euros, un 36% más que en 2020. La venta a tipo de cambio constante creció un 37%. Esta cifra de ventas se obtuvo con un 5% menos de tiendas que en 2020 (13% menos frente a 2019). 

Quizás la espinita clavada la tiene al no haber conseguido cerrar con récord histórico de beneficios como los analistas vaticinaban. Cierto es que no lo ha conseguido porque el cuarto trimestre se vio muy afectado por las restricciones derivadas de la variante ómicron. De hecho, en el tercer trimestre si hubo récord de ganancias.

Pero si tenemos en cuenta que el pasado año la compañía cerró con 1.106 millones de beneficios, el resultado de este año es muy positivo. Triplica beneficios y devuelve a la compañía a cifras anteriores a la Covid.

Durante la pandemia, la compañía bajo su liderazgo fue la única de las grandes del textil que no aplicó ningún tipo de ERTE entre su plantilla a pesar del cierre de tiendas que llevó a cabo. Eso les supuso sus primeros números rojos trimestrales.

Pero también aceleró su estrategia online. Tanto que ha batido sus propios objetivos. Esta creció un 14% para alcanzar los 7.500 millones de euros, un 25,5% de la venta total en 2021. "Si vemos lo que era la venta online en 2017 y hoy se ha multiplicado por tres. De 2.500 millones a 7.500 millones", destacó el mismo. 

Plan de inversiones

Recordemos que el plan de inversiones anunciado para el periodo 2020-2022 implica invertir 1.000 millones de euros en digitalización y 1.700 millones de euros para la plataforma integrada de tienda y online. Inditex espera que la venta online supere el 30% de la venta total en 2024.

Sin embargo, esta estrategia también implicaba el cierre de tiendas físicas. La optimización de las tiendas está en la fase final prevista (578 tiendas absorbidas en 2021). Al cierre del ejercicio Inditex operaba un total de 6.477 tiendas y prácticamente ha culminado el cierre de establecimientos. 

Se trata de un proceso que llegó a su punto más extremo en 2020, cuando cerró el ejercicio con 6.829 tiendas, 640 menos que un año antes. Atrás quedan años de crecimiento a golpe de aperturas de tiendas. En 2015, la compañía contaba con 7.013 establecimientos. Estamos hablando de años de crecimiento en el plano físico que continuaron en 2016 (cerró con 7.292 tiendas), 2017 (7.475) y 2018 (7.490). 

Aunque su primer gran hito llegó hace más de diez años, cuando en 2011 consiguió superar en ventas a su gran rival: H&M. En ese año se convirtió en presidente del grupo textil en sustitución de Amancio Ortega, pero ya llevaba desde 2005 como CEO.

Transición

En noviembre del pasado año fue cuando se anunció la entrada de Marta Ortega como futura presidenta en lugar de Pablo Isla. Un proceso en el que el directivo, en su última presentación de resultados como presidente de Inditex, ha reconocido estar "centrado", no desvelando su futuro pero anticipando que no se va "a retirar".

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Isla aseguró que tiene "máxima confianza en el futuro de la compañía con Marta Ortega como presidenta y en Óscar Maceiras como CEO". El nuevo equipo parte con grandes retos que Isla ha ido allanando por el camino (venta online, cierre de tiendas, sostenibilidad…) y con otros fruto de la situación actual.

El principal es la situación de sus tiendas en Rusia y Ucrania, cerradas temporalmente por el conflicto bélico. Estamos hablando de casi 600 tiendas que suponen un 8,5% de su ebit y 5 puntos porcentuales del crecimiento de las ventas entre el 1 de febrero y el 13 de marzo. Quizás centrarse en otros mercados como EEUU -el segundo más importante para la compañía- ayude a amortiguar el golpe sufrido por la guerra.

Y, derivado de esto, hay otro gran problema con el que tendrá que lidiar Marta Ortega: la inflación, a la que no es ajena el grupo. De hecho, ya han anunciado que realizarán "ajustes selectivos" en determinados mercados si la situación lo requiere. Uno de ellos es el de España, para el que subirán un 2% los precios en la campaña primavera/verano.