La cadena de comida rápida McDonald's informó que sus 1.250 locales en Inglaterra, Escocia y Gales se han quedado sin batidos y sin refrescos embotellados ante la falta de suministros.
La industria alimentaria en el Reino Unido sufre tras el Brexit serios problemas para reclutar a trabajadores y, en particular, a transportistas, lo que provoca retrasos en la producción y la distribución.
"Como la mayoría de los minoristas, actualmente estamos experimentando algunos problemas de la cadena de suministros, lo que impacta en la disponibilidad de un número limitado de productos", dijo a los medios un portavoz de McDonald's.
"Las bebidas embotelladas y los batidos están temporalmente fuera de la oferta en nuestros restaurantes" de Reino Unido, recalcó ese portavoz, que agradeció la "paciencia" de sus clientes.
Cabe recordar que la semana pasada, Nando's se vio obligado a cerrar alrededor de 50 restaurantes por la escasez de pollo. Culparon a la falta de personal entre sus proveedores y a la reducción en la cantidad de conductores de camión. KFC también dijo hace poco que los problemas en la cadena de suministro significaban que no podría abastecerse de algunos productos del menú.
Emplear a comunitarios
La cadena también está sufriendo la falta de transportistas. Y es que desde que se materializó el Brexit, las empresas no pueden emplear a comunitarios sin un visado de trabajo o bien con el estatus de "asentado" en el Reino Unido. Desde que se oficializó el divorcio de la UE, unos 14.000 conductores europeos han dejado el país.
La patronal británica de transportistas por carretera (Road Haulage Association) advirtió en julio de que existe un déficit de 100.000 conductores en el Reino Unido y exigió al Gobierno que facilite la contratación de trabajadores extranjeros.
La pandemia ha empeorado la situación, según la patronal, dado que cerca de 30.000 exámenes de conducción para nuevos transportistas quedaron suspendidos el año pasado, lo que dificulta la contratación de personal local.