El presidente de CaixaBank, Jose Ignacio Goirigolzarri, y el consejero delegado Gonzalo Gortázar, hablan con un accionista en la Junta celebrada el 8 de abril de 2022, en Valencia.
¿Ganan mucho los banqueros? Botín, Torres, Oliú y Goirigolzarri afrontan el voto de los accionistas
El número de votos en contra de la política de las remuneraciones de los grandes bancos españoles se ha disparado en los últimos años.
19 febrero, 2023 01:57¿Ganan demasiado Carlos Torres, Ana Botín, José Ignacio Goirigolzarri o Josep Oliú? Llega el momento de que sean los accionistas los que se pronuncien al respecto, en las Juntas Generales que los grandes bancos han comenzado a convocar estos días.
En los últimos años el número de votos en contra de accionistas sobre las retribuciones de los consejos de administración de los grandes bancos españoles se ha disparado. Este ejercicio habrá que ver si la tendencia se mantiene o si los grandes beneficios comunicados por las entidades, los dividendos propuestos y la recuperación en Bolsa de los valores financieros aplacan el descontento de los titulares de acciones hacia las retribuciones millonarias de los consejeros.
Carlos Torres y Onur Genç, presidente y consejero delegado de BBVA, ganaron el pasado año 8,29 y 7,15 millones respectivamente, un 5,7% y un 4,9% más que en 2021, según ha informado el segundo mayor banco español esta semana, que celebra Junta de Accionistas el próximo día 16 de marzo en Bilbao.
Carlos Torres y Onur Genç, presidente y consejero delegado de BBVA.
El presidente de CaixaBank, José Ignacio Goirigolzarri, percibió 2,1 millones en 2022, y Gonzalo Gortázar, consejero delegado, 3,9 millones, informó el viernes la entidad participada por el Frob, que celebra Junta el próximo día 30 de marzo en Valencia. Sabadell también comunicó ayer las retribuciones de sus consejeros: César González-Bueno recibió 2,47 millones en su primer año entero como consejero delegado, y el presidente, Josep Oliú, ganó 1,76 millones.
En 2021 la presidenta de Santander, Ana Botín, ganó más que cualquier otro año en el cargo, 12,2 millones de euros, y el consejero delegado de la entidad, José Antonio Álvarez, 9,7 millones.
"Estamos analizando los informes de remuneraciones de los bancos, todavía no tenemos decidida nuestra recomendación del voto en contra, depende del cumplimiento de los objetivos alcanzados, de la comparación de los salarios con otras entidades similares, del valor de la acción...", comenta Juan Prieto, fundador y consejero delegado de Corporance Asesores de Voto, socio para España y Portugal de la red internacional de proxy advisors liderada por el grupo suizo Ethos.
José Antonio Álvarez, exconsejero delegado de Santander, y la presidenta Ana Botín.
La tendencia del incremento del voto en contra de las remuneraciones de grandes corporaciones "es global, en Estados Unidos también ha crecido en los últimos años". En España, Prieto considera que los accionistas han ido otorgando cada vez más relevancia a sus votos en las Juntas y prevé que este año se mantenga la inercia de un mayor pronunciamiento en contra de las remuneraciones consideradas excesivas.
En la última Junta celebrada por BBVA, los accionistas mostraron un rechazo histórico al informe anual de remuneraciones del Consejo de Administración: el 11,1% del capital social del banco representado en la Junta de 2022 votó en contra, 483,89 millones de votos. Sólo cinco años antes, en 2017, el número de votos en contra de las retribuciones fue de 99,7 millones.
Tan relevante fue el rechazo de los accionistas a la retribución del Consejo de BBVA como lo fue el mostrado por los de Santander, también el mayor de su historia: el 11,99% de los accionistas que votaron lo hicieron en contra, frente al 8,4% registrado en la Junta de 2021.
Jaime Guardiola, exconsejero delegado de Sabadell; Josep Oliú, presidente; y Gustavo González-Bueno, consejero delegado.
En 2015, el primer ejercicio completo con Ana Botín como presidenta, el porcentaje de votos en contra del informe de remuneraciones de la entidad fue del 2,1%. Pasó al 2,3% en 2016, se elevó al 3% un año después, en 2018 alcanzó el 3,74%, el 4,42% en 2019 y el 6,23% en 2020.
Sabadell fue la entidad que el pasado año recibió el mayor rechazo de sus accionistas al informe de remuneraciones del Consejo de Administración. El 38,4% de los accionistas votaron en contra, frente al 10% del ejercicio anterior.
Las elevadas retribuciones percibidas entonces por Oliú -más de 9 millones al consolidar 7,5 millones de plan de pensiones- y por el anterior consejero delegado, Jaime Guardiola -en total 24,3 millones-, explican posiblemente el castigo de los accionistas.
Mención aparte requiere el caso de CaixaBank, al tener como uno de sus mayores accionistas al Frob, tras la integración de Bankia en su estructura. En la Junta de 2021, el organismo público votó en contra de la modificación de la política de remuneraciones, alcanzándose un rechazo del 23%; el pasado año el Frob se abstuvo, y el voto en contra del informe de remuneraciones fue inferior al 2%.
La vicepresidenta y ministra de Economía Nadia Calviño insiste desde hace tres años en que las retribuciones de las cúpulas de los bancos españoles es "inaceptable". Los bancos defienden los salarios y bonus entregados a sus consejos de administración vinculándolos a la mejora de los resultados y al cumplimiento de los objetivos propuestos. Turno de los accionistas.
