El BCE alerta de riesgos para la banca si se retiran las ayudas públicas a familias y empresas
El BCE da señales de que levantará el veto al dividendo del sector en diciembre.
25 noviembre, 2020 12:40Noticias relacionadas
El vicepresidente del BCE, Luis de Guindos, ha vuelto a advertir de los riesgos que implicaría para el sector bancario europeo la retirada de los apoyos públicos puestos en marcha por los Gobiernos para salvar de la crisis a empresas y familias.
Así lo ha explicado durante la presentación del informe semestral de estabilidad financiera del BCE, en el que ha vuelto a quedar patente la debilidad de la rentabilidad del sector bancario. El organismo monetario lo tiene claro: sin el soporte público a los afectados por la pandemia, será muy difícil que la banca se recupere en estos términos.
Durante la presentación del documento, Guindos ha explicado que "la rentabilidad de los bancos va a seguir débil. Las provisiones han aumentado, pero parecen optimistas en algunos casos, mientras las garantías y moratorias pueden haber prolongado el tiempo que lleva que la debilidad económica se traduzca en pérdidas por créditos morosos".
En este sentido, insiste en el mensaje de que el sector no debe 'dormirse en los laureles' con las provisiones, después de que estas bajaran sensiblemente en el tercer trimestre tras las fuertes dotaciones acometidas hasta junio.
Desde la banca defienden que las mencionadas provisiones se han realizado teniendo en cuenta las previsiones de morosidad futura, explicando que si el entorno empeora, volverán a elevarlas si es necesario. Banco Santander, de hecho, dejó claro la pasada semana que podría seguir generando beneficios incluso duplicando el nivel de provisiones actual.
La fortaleza de capital permitiría, además, que el sector siga haciendo frente al pago del dividendo el próximo año. Este mismo miércoles, en una entrevista con el diario 'Financial Times', el ejecutivo luxemburgués del BCE, Yves Mersch, dejaba entrever la disposición del banco central a no prolongar su recomendación a las entidades de no repartir dividendos de cara al próximo ejercicio, aunque solo en el caso de las más saneadas.
"Todo dependería del conservadurismo de los modelos internos de los bancos, del conservadurismo en el aprovisionamiento y de una visión sólida de la trayectoria de capital de un banco. Todo esto deberá tenerse en cuenta y luego llegaremos a una propuesta a finales de año", ha indicado.
El BCE decidió a finales del pasado mes de julio extender hasta el 1 de enero de 2021 su recomendación a la banca de no repartir dividendos y no efectuar recompras de acciones propias para preservar el capital de las entidades, aunque indicó que revisaría su posición al respecto a finales de 2020.