La Comisión de Ursula von der Leyen ha presentado este jueves una batería de medidas a corto plazo cuyo objetivo es flexibilizar algunos de los requisitos medioambientales de la política agrícola común (PAC) con el fin de reducir las cargas administrativas que pesan sobre los agricultores. Von der Leyen ha adoptado esta iniciativa en respuesta a la ola de protestas del sector en un gran número de Estados miembros, entre ellos España.

De cara a la próxima legislatura tras las elecciones a la Eurocámara del 9 de junio, Von der Leyen plantea una reforma limitada de la PAC  para eximir a las pequeñas explotaciones de menos de 10 hectáreas de los controles relacionados con el cumplimiento de los requisitos medioambientales.

Esta exención simplificaría significativamente el trabajo diario de los pequeños agricultores, que representan el 65% de los beneficiarios de la PAC, manteniendo al mismo tiempo sus ambiciones medioambientales de la PAC, ya que las pequeñas explotaciones solo cubren el 9,6% de las zonas que reciben ayudas, según ha dicho el Ejecutivo comunitario.

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El paquete de medidas que propone Von der Leyen se discutirá por primera vez en la reunión de ministros de Agricultura de la UE del 26 de febrero. "La Comisión mantiene su pleno compromiso de ofrecer soluciones que alivien la presión que sufren actualmente las mujeres y los hombres del campo, que trabajan duramente", ha dicho la presidenta en un comunicado.

"Vamos a aliviar la carga administrativa que pesa sobre nuestros agricultores para ayudarles a garantizar la seguridad alimentaria de los ciudadanos europeos. La simplificación de nuestras políticas agrícolas es una prioridad constante, tanto a escala nacional como de la UE", asegura Von der Leyen.

En cuanto a las iniciativas a corto plazo, Bruselas ya ha concedido para 2024 una exención parcial 2024 de las normas sobre tierras en barbecho. Ahora plantea nuevas medidas de flexibilidad para que los agricultores con ganado reducido no tengan que reconvertir las superficies cultivables en pastos. La Comisión también revisará qué prácticas agrícolas pueden ser posibles durante períodos sensibles a la hora de cumplir la obligación de cubrir los suelos.

Además, Von der Leyen propone simplificar la metodología para determinados controles, con el fin de reducir hasta un 50% el número de visitas a las explotaciones por parte de las administraciones nacionales. Esta medida responde directamente a las solicitudes de los Estados miembros. Con menos visitas de la administración para gestionar, los agricultores dispondrán de más tiempo para dedicarse a su trabajo principal, sostiene Bruselas.

Finalmente, la Comisión aclarará el uso del concepto de fuerza mayor y circunstancias excepcionales. Este término jurídico permite que a los agricultores que no puedan cumplir todos sus requisitos de la PAC debido a acontecimientos excepcionales e imprevisibles fuera de su control (como en casos de sequías graves o inundaciones) no se les impongan sanciones.

De este modo, los agricultores afectados tendrán más seguridad en cuanto a la recepción de sus pagos de la PAC y las administraciones nacionales se beneficiarán de una interpretación más clara a escala de la UE, evitando errores presupuestarios.