La inflación de la eurozona se redujo en noviembre al 2,4%, frente al 2,9% registrado en octubre, gracias a la caída de los precios de la energía y a la moderación de los alimentos, según la estimación inicial publicada este jueves por Eurostat, la oficina estadística comunitaria.

Se trata del séptimo mes consecutivo que disminuye la inflación, que se sitúa ya en el nivel más bajo desde julio de 2021. La caída ha sido más fuerte de la que esperaban los analistas (que vaticinaban un 2,7% en noviembre, según la encuenta de Reuters). El nivel de precios se acerca así al objetivo del 2% que persigue el Banco Central Europeo (BCE).

Por su parte, la inflación subyacente -que excluye energía, alimentos, alcohol y tabaco, los elementos más volátiles- también experimenta una fuerte bajada desde el 4,2% en octubre al 3,6% en noviembre. Este es un indicador estructural clave para la institución dirigida por Christine Lagarde a la hora de decidir sobre los tipos de interés. 

[Lagarde (BCE) avisa de que la economía se estanca y la inflación repuntará levemente en los próximos meses]

En España la inflación armonizada también se redujo desde el 3,5% en octubre al 3,2% en noviembre. Sin embargo, el nivel de precios en nuestro país se sitúa por segundo mes consecutivo por encima de la media de la eurozona, lo que implica una pérdida de competitividad.

La inflación de España está ya por encima de la de Alemania (donde cayó con fuerza desde el 3% en octubre al 2,3% en noviembre) y de la Italia (que también experimenta una gran bajada del 1,8% al 0,7%). Entre las grandes potencias de la eurozona, sólo Francia tiene una tasa mayor que la española (3,8%).

Tasa de inflación en los países de la eurozona en noviembre

En noviembre, los precios cayeron en Bélgica (-0,7%) y apenas subieron en Italia y Finlandia (0,8%). En el extremo contrario de la clasificación, los Estados miembros de la eurozona con una inflación más alta son Eslovaquia (6,9%), Croacia (5,5%), Austria (4,9%) y Eslovenia (4,5%).

Si se analizan los principales componentes del IPC de la eurozona, los alimentos son el factor que más ha subido en el último año (aunque se desaceleran desde el 7,4% en octubre al 6,9% en noviembre). En segundo lugar, están los servicios (con una subida del 4% en noviembre frente al 4,6% en octubre).

Por su parte, los precios de los productos industriales no energéticos suben un 2,9% en noviembre frente al 3,5% en octubre. Finalmente, la energía cae un 11,5% en comparación con hace un año (frente a un -11,2% en octubre).

Pese a los buenos datos de inflación, Lagarde insistió este lunes en una comparecencia en la Eurocámara en que todavía es pronto para cantar victoria en la lucha contra la inflación, cuya evolución a medio plazo sigue rodeada de "considerable incertidumbre".

"De cara al futuro, esperamos que continúe el debilitamiento de las presiones inflacionarias, aunque la inflación general podría volver a aumentar ligeramente en los próximos meses, debido principalmente a algunos efectos de base. Sin embargo, las perspectivas de inflación a medio plazo siguen rodeadas de considerable incertidumbre", avisa la presidenta del BCE.

Lagarde ha repetido que mantendrá los tipos de interés en los actuales máximos del 4,5% "todo el tiempo que sea necesario" para garantizar que la inflación vuelva al objetivo del 2% de forma sostenible. El Consejo de Gobierno volverá a examinar la situación en su encuentro del 14 de diciembre con previsiones actualizadas de inflación y crecimiento.

"Para el BCE, están aumentando las señales de una victoria inminente en materia de inflación", sostiene Bert Colijn, economista senior de ING especializado en la eurozona. A su juicio, Lagarde empezará a bajar los tipos antes del verano de 2024.