Un respaldo por el que el Partido Popular reclamó explicaciones a Cabrales, máxime por habérselo ocultado en el proceso de selección previo. Unas llamadas que forzaron, según fuentes conocedoras, a que Cabrales tomara la decisión de abandonar el cargo para evitar verse expuesto al fuego político e, incluso, evitar presiones futuras. 

No hay que olvidar que Cabrales iba a situarse en la Comisión Ejecutiva, que atiende a los asuntos de mayor relevancia del banco central. 

[El Gobierno nombrará consejeros del BdE a Judith Arnal, exjefa de gabinete de Calviño y a Antonio Cabrales]

Fuentes del Gobierno se muestran sorprendidas por todo lo ocurrido, y se preguntan cómo es posible que en el Partido Popular nadie supiera de las acciones previas de su candidato al Banco de España. De hecho, tras su elección desde las filas populares se destacaba su "irreprochable" perfil alejado de todo tipo de partidismos. 

Otros, en cambio, se muestran sorprendidos por la actitud del Partido Popular ya que "siempre expresaron su intención de poner a alguien independiente. Visto esto, ¿hay alquien con mayor independencia que Cabrales?", se preguntan.

Ahora bien, creen que lo ocurrido demuestra que la intención del PP era (y puede ser) la de tratar de influir en el consejo del Banco de España, por lo que loan la salida del catedrático de Economía de la Universidad Carlos III de Madrid. 

Cabrales ha declinado hacer comentarios a este periódico, aunque ha pedido a su entorno que traslade que "al país le sobra ruido y él no quiere contribuir a eso". De hecho, se muestran convencidos de que se encontrará un candidato de peso para el consejo del Banco de España.

La versión del PP 

¿Y qué dicen en el Partido Popular? Su presidente, Alberto Núñez Feijóo, señalaba este miércoles que se "desconocían algunos antecedentes que para mucha gente son incompatibles con formar parte de un organismo del Estado". Por tanto, a su juicio, "la decisión del interesado es correcta porque no quería producir tensiones" en el seno del Banco de España. 

Sin embargo, en la trastienda de Génova existe cierto malestar con el equipo negociador. La portavoz parlamentaria, Cuca Gamarra, fue quien lideró las conversaciones con el Gobierno y, por tanto, son muchos quienes miran hacia su despacho a la hora de reclamar explicaciones. 

Consideran que se trata de un 'patinazo' en una institución clave como es el Banco de España en donde el consenso siempre ha reinado. Además, era uno de los pocos acuerdos alcanzados por el PP y el Gobierno y, además, iban a colocar a su candidato en la cúpula del Banco de España, ya que Cabrales iba estar en el núcleo 'duro' junto al gobernador, Pablo Hernández de Cos; la subgobernadora Margarita Delgado y la consejera Soledad Núñez. 

Por si fuera poco, la falta de adscripción política de Cabrales se ha desvelado en un apoyo al indepentismo catalán, con todo lo que ello conlleva para el Partido Popular. Así que ahora en el PP se trabaja en buscar un nuevo candidato para proponer y consensuar con los equipos del ministro de Presidencia, Félix Bolaños, y la vicepresidenta primera, Nadia Calviño. 

Nadia Calviño, vicepresidenta primera del Gobierno, este jueves en la Cámara de Comercio. Juan Carlos Hidalgo EFE

Se busca, por tanto, al nuevo sustituto de Fernando Eguidazu cuyo mandato en el consejo del Banco de España expira tras siete años en el cargo. Junto a él se releva también a Carmen Alonso que será reemplazada (a propuesta del Gobierno) por Judith Alonso, exjefa de gabinete de Nadia Calviño. 

Fuentes consultadas por este diario creen que no habrá excesivos problemas para renovar el pacto y, desde el Gobierno, insisten en que su mano está tendida a la espera de que el Partido Popular mueva ficha y ponga nombres encima de la mesa. 

Una vez se resuelva el enigma del PP habrá que prestar atención a lo que ocurra con Núria Mas, cuyo mandato también finaliza y que forma parte de la cuota catalana de la cúpula del Banco de España. Sin embargo, es posible que se opte por su renovación.