El alejamiento de Cepyme de la línea oficial de CEOE fuerza a Garamendi a buscar un relevo para Gerardo Cuerva
Lorenzo Amor descarta optar a la presidencia de la organización representativa de las pyme.
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2025 es año electoral para las pymes españolas. La principal patronal, Cepyme, abrirá los comicios este año al caducar el mandato de Gerardo Cuerva. Sin embargo, no está nada claro que el empresario granadino vaya a repetir al frente de la organización.
Cuerva se ha ido progresivamente alejando de Antonio Garamendi, y el presidente de CEOE está rastreando posibles candidatos para hacerle frente en unos eventuales comicios. Con todo, el presidente de Cepyme tampoco tiene claro que se vaya a presentar a la reelección.
Voces de la cúpula de la CEOE admiten que, de un tiempo a esta parte, se viene dando un progresivo distanciamiento entre Garamendi y Cuerva... y entre la propia CEOE y Cepyme.
Lo cierto es que la patronal de las pymes cada vez más busca un perfil propio y no ser sólo la extensión de la CEOE en el universo de las pequeñas y medianas empresas. En el último año, han reivindicado su papel a través de numerosos informes y actos.
En este sentido, las fuentes consultadas admiten que Cuerva venía teniendo una posición 'menos sumisa' respecto a la CEOE que otros presidentes de Cepyme en el pasado.
Curiosamente, se podría decir que ha imitado la línea de conducta del propio Garamendi cuando presidió Cepyme con su homólogo en aquellos años de CEOE, Juan Rosell.
En cualquier caso, los choques entre Antonio Garamendi y Gerardo Cuerva no son nuevos. Ya con la gestión de la reforma laboral tuvieron un agrio enfrentamiento, al entender el de Cepyme que la limitación a los contratos temporales afectaba principalmente a las pequeñas y medianas empresas.
Algo similar ocurre en el caso de las sucesivas subidas del salario mínimo. Cuerva considera que no ha habido suficiente ruido por parte de la CEOE contra esta medida.
Y cabe recordar que el empresario granadino promovió un duro manifiesto en verano contra la "política persecutoria e incriminatoria hacia el empresario" en una asamblea que contó con el apoyo del azote del Ejecutivo, Isabel Díaz Ayuso, presidenta de Madrid.
En la cúpula de la CEOE consideran que no es buen momento para un enfrentamiento en el seno de la patronal como el que puede suceder por la presidencia de Cepyme.
Recuerdan que el momento es delicado: hay importantes negociaciones en el aire con el Gobierno, como la reducción de la jornada laboral o la citada subida del salario mínimo. Y también están las medidas del Ejecutivo para acotar la presencia de CEOE y Cepyme en los órganos del Diálogo Social en favor de Pimec y Conpymes.
Recuerdan, además, que tradicionalmente el presidente de Cepyme suele ser una figura de confianza del primer espada de la CEOE. "No podemos tener peleas y broncas en estos momentos. Tenemos que priorizar la unidad empresarial y la defensa de intereses de la empresa", añaden.
Dichas voces no descartan que haya un proceso electoral en Cepyme, si Cuerva se acaba presentando y Garamendi encuentra a su propio candidato. Pero llaman a que "no sea una lucha con demasiados heridos. Tenemos que resolver este conflicto sin sangre".
La incógnita es quién puede ser el hombre o la mujer de Garamendi para Cepyme, si finalmente hay algún designado. En los últimos meses hay un nombre que ha sonado fuerte en los correveidiles de la patronal: Lorenzo Amor.
El vicepresidente de CEOE se ha convertido en uno de los hombres de confianza del vasco. Sin embargo, Amor descarta la posibilidad de acabar dirigiendo Cepyme.
A consultas de este periódico, afirma que lo único que se plantea en estos momentos es si se presentará a la reelección en la Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA), que tiene que renovar mandato también este 2025, algo que decidirá a finales de este mes. En sus planes no está optar a presidir Cepyme.
Otro nombre que ha salido como posible sucesor de Cuerva y que estaría entre las posibles elecciones de Garamendi es el de Fermín Albaladejo, presidente de la Confederación Española de Asociaciones de Jóvenes Empresarios (CEAJE) desde 2016.
En cualquier caso, el proceso electoral de Cepyme ni siquiera está abierto. Y el propio Gerardo Cuerva admitía este lunes que todavía no había podido hablar con Garamendi sobre los movimientos que ha estado haciendo el empresario vasco, aunque es consciente de ellos, como ha admitido ante los medios de comunicación. Es de esperar que, en la reunión que celebren este martes, aclaren posturas.