El despido disciplinario crece un 200% desde 2021 y se convierte en la vía para echar a trabajadores tras la reforma
El 91% de los despidos disciplinarios entre enero y julio fueron de trabajadores con contratos indefinidos.
25 septiembre, 2023 02:24La reforma laboral nació con la intención de acabar con la temporalidad en el empleo. La contratación temporal se acotó a casos muy concretos y los contratos indefinidos se convirtieron en norma. Mientras los datos de empleo llevan meses reflejando esa mejora, las cifras de despidos presentan otra realidad. Entre enero y julio de 2023, se han registrado 309.205 despidos disciplinarios, un 200% más que en esos mismos siete meses de 2021, antes de la nueva legislación laboral.
El Estatuto de los Trabajadores reconoce el despido disciplinario cuando existe un incumplimiento grave y culpable del trabajador, y recoge casos como faltas de asistencia injustificadas, ofensas verbales o físicas, la disminución del rendimiento en el trabajo, la embriaguez o el acoso.
Los despidos disciplinarios apenas llegaban a 30.000 al mes antes de la reforma laboral. De hecho, muchos meses ni siquiera llegaban a 25.000. Sin embargo, con la entrada en vigor de la reforma laboral, pactada de forma tripartita entre el Gobierno, los empresarios y los sindicatos, los despidos por esta causa se han disparado.
Ahora, las estadísticas de la Seguridad Social reflejan un aumento de las bajas por despido disciplinario. En los siete primeros meses de este año, sólo se bajó de 40.000 despidos mensuales en abril, con 37.696 contratos suspendidos por cuestiones de disciplina.
El aumento comienza a verse a partir de 2022. A partir de mayo de ese año, con la reforma laboral en vigor desde enero, se observa una tendencia de despidos disciplinarios al alza.
El 91% eran indefinidos
De los 309.205 despidos disciplinarios contabilizados entre enero y julio de 2023, 280.877 fueron de trabajadores con contrato indefinido y 27.859 de empleados con contrato temporal.
Las cifras evidencian que el despido disciplinario se impone como vía para prescindir de empleados con un contrato permanente. El 90,8% de los despidos disciplinarios se correspondieron con empleados indefinidos, frente a un 9% de indefinidos.
El porcentaje es elevado, pero resalta todavía más al compararlo con ejercicios anteriores. En los mismos meses de 2022, el total de despidos disciplinarios se situó en 231.809, de los que el 76,6% eran trabajadores indefinidos y el 23,18%, temporales. En números absolutos, se traduce en 177.709 despidos disciplinarios de empleados con contrato indefinido y 53.754 empleados con contrato temporal.
Un año antes, en 2021, los despidos disciplinarios de enero a julio se cifraron en 154.476. Los indefinidos sólo representaron un 69%, con 106.679 despidos disciplinarios, y los temporales, un 30,7%, con 47.534.
Los expertos coinciden en que las empresas están recurriendo al despido disciplinario como forma de extinción de contratos, ante la dificultad para hacer contratos temporales.
La explicación que encuentra la presidenta de la Asociación Nacional de Laboralistas (Asnala), Ana Gómez, es que ante la reconversión de contratos temporales en indefinidos, las empresas han encontrado "una vía para despedir" en los despidos disciplinarios.
Sin embargo, en Asnala no aprecian todavía una tendencia definida en los despidos disciplinarios.
Por su parte, el socio director de Zeres Abogados, Fabián Valero, admite que los casos de despidos disciplinarios son "bastante frecuentes últimamente".
"Al haber más trabajadores indefinidos, debido a las nuevas limitaciones de la contratación temporal, el despido disciplinario es el cauce para extinguir contratos cuando la empresa está descontenta con el rendimiento de la persona trabajadora aunque no tenga causa disciplinaria real", explica Valero a EL ESPAÑOL-Invertia.
El despido disciplinario se ha convertido así a la alternativa de las empresas a la desaparecida contratación temporal. Valero recuerda que los despidos disciplinarios son legales, pero pueden ser improcedentes si se demuestra inexistente la causa disciplinaria.
Sindicatos y despidos
El despido fue uno de los puntos que quedó fuera de las negociaciones de la reforma laboral. Lo hizo, además, de manera expresa, para que los agentes sociales y el Gobierno pudieran llegar a un acuerdo para actualizar la normativa laboral.
El hecho de que se excluyera de la mesa de diálogo no implica que los sindicatos renunciaran a tratar esta cuestión. Su intención era abordarlo en conversaciones posteriores, una vez alcanzado el pacto.
La situación del despido en España preocupa a los sindicatos y tanto CCOO como UGT han presentado sendas denuncias ante el Comité Europeo de Derechos Sociales.
UGT espera una resolución para diciembre de este año y confía en que se pronuncie a su favor, como ya ocurrió en casos anteriores en Francia e Italia. El sindicato reclama que el despido en España sea disuasorio y resarcitorio, y pide que la compensación atienda a la gravedad y a los daños causados a la persona trabajadora.
[CCOO pedirá al próximo Gobierno una nueva regulación del tiempo parcial y cambios en los despidos]
El Comité Europeo de Derechos Sociales también admitió la denuncia de CCOO. Además, el sindicato ha presentado esta semana sus propuestas para la próxima legislatura en las que también plantea modificaciones en el despido.
Entre ellas, cita fórmulas disuasorias como la readmisión cuando haya despido improcedente o una indemnización mínima más allá de la antigüedad que tenga la persona despedida. CCOO también aboga por mejoras en la indemnización o la recuperación de los salarios de tramitación.