La última encuesta de población activa (EPA) mostró que ya en la segunda mitad de 2022 el mercado laboral había perdido el impulso de la recuperación económica y de la reforma laboral en la generación de empleo. Esta tendencia continuó en enero. Según los datos del Ministerio de Seguridad Social y del de Trabajo, el mes pasado se perdieron 215.047 ocupados de media y se sumaron a las listas de paro 70.744 personas más.
De esta manera, enero cumple con lo que se esperaba de él. El primer mes del año es tradicionalmente negativo para el empleo puesto que es el periodo posterior a la campaña navideña, cuando habitualmente se produce una explosión de puestos de trabajo.
En el caso de la Seguridad Social, la caída de cotizantes supone un retroceso de más del 1%. Se trata del tercer peor enero desde 2013 (se perdió más empleo en 2021 y 2020, justo antes de la pandemia).
Con todo, el empleo no ha bajado de la barrera psicológica de los 20 millones de cotizantes a la Seguridad Social (aunque se queda cerca de hacerlo, con 20.081.224). Mientras, en términos desestacionalizados, el empleo suma, según los cálculos del equipo de José Luis Escrivá, 57.726 afiliados en enero, llegando hasta los 20.298.620 en total.
Por otro lado, el incremento del paro ha llevado a que la cifra de desempleados registrados se sitúe en 2.908.397 (la más baja en un enero desde 2008).
Pese al aumento del paro, no es el peor enero que se recuerda en lo laboral. Poniéndolo en la perspectiva de los últimos diez años, fueron peores los eneros de 2021, 2020, 2019, 2015 y 2014.
La práctica totalidad de los nuevos parados proceden del sector servicios (con 79.759 personas) y agricultura (1.457). El paro solo se reduce en una región, Baleares.
Caída de contratos
Hay otro dato llamativo en la información que ofrece el Ministerio de Trabajo: el número de contratos firmados en enero respecto al mismo mes de 2022 cayó un 25%, hasta los 1,2 millones.
Con la reforma laboral, las autoridades laborales y los expertos ya habían vaticinado una reducción de la contratación. Con menos contratos temporales y más indefinidos, forzosamente tenía que bajar el número de contratos firmados. Con todo, la reducción es muy elevada. Habrá que esperar si es síntoma de nuevas formulaciones en el mercado laboral.
Pese a esta caída de los contratos firmados, se mantiene el incremento de la contratación indefinida. Se firmaron 536.300 contratos fijos en enero, un 122% más que en el mismo mes de 2022.
De estos contratos, 236.443 son a tiempo completo (un 62,2% más), 119.895 a tiempo parcial (un 80,2% más) y 173.968 fijos discontinuos (un 558,3% más).