Antonio Garamendi, presidente de la CEOE, ha asegurado que la reforma laboral no es la solución para mejorar la temporalidad. Por el contrario, propone "sentarse a negociar" las condiciones de los contratos además de jamás "atacar el marco de la competencia" con medidas estatales como incrementar la presión fiscal.
Así lo ha afirmado el presidente de la CEOE en la Asamblea General de UNO (Organización Empresarial de Logística y Transporte de España), donde su presidente, Francisco Aranda, ha mostrado su preocupación por la fiscalidad y por el marco laboral. Dos ámbitos que, en su opinión, afectan a la logística y el transporte al "limitar la flexibilidad laboral para generar empleo".
Francisco Aranda ha señalado en el encuentro de la Asamblea General de UNO que la propuesta de "modernización" laboral que presentó el Ministerio de Trabajo para limitar a un año los contratos temporales genera "incertidumbre".
Así, ha argumentado que las medidas de control de la temporalidad no funcionan, ya que al limitar la flexibilidad de las empresas en periodos de demanda alta (como en Navidad), se hace complicado responder a la petición del consumidor y se corre el riesgo de "cerrar y no generar empleo".
Postura CEOE
Ante esta situación, la CEOE a través de su presidente, ha mostrado su rechazo ante la reforma laboral. Según Garamendi, es cierto que Europa "ha pedido cambios en la temporalidad", pero "jamás una reforma laboral". Así ha identificado la solución en sentarse a "revisar las condiciones de los contratos" y fomentar el "diálogo social", en lugar de tomar medidas que puedan afectar a la competitividad de las empresas.
Por otro lado, el presidente de la patronal de las empresas ha señalado que el 25% de los contratos laborales en España son temporales dentro de la iniciativa privada y en la administración pública asciende hasta el 33%. Por lo que ha advertido de que "antes de influir en las empresas, habría que revisar la situación de lo público".
Así la CEOE ha añadido que "no hay que tomar medidas que afecten a la igualdad en la competencia". Por ello, admite que las subidas fiscales que se plantean en el ámbito empresarial pueden dañarla. "Europa, la OCDE y el Banco de España dicen que no es el momento para llevar a cabo estos cambios", ha alertado respecto a la reforma laboral y subidas de impuestos.
Fiscalidad
Por último, en cuanto a fiscalidad la CEOE ha reivindicado su postura de "bases imponibles más que tipos". Como ejemplo ha querido sacar a colación Andalucía, donde desde que se ha suprimido en impuesto sobre sucesiones "se han incrementado en 600 millones" la recaudación.
Asimismo, ha señalado que según un estudio del Instituto de Estudios Económicos la recaudación se estimula si se disminuyen los tipos exigidos.
"La presión fiscal de los ciudadanos en España es alta si se divide el total de la recaudación por los ciudadanos que pagan impuestos". Según el estudio, Madrid es de las comunidades con menos economía sumergida (14%) a la vez que una de las comunidades con menor presión fiscal. Por lo que el estudio determina que a menor tipos exigibles, la sociedad está más predispuesta a generar recaudación.