La inflación y la pérdida de poder adquisitivo obligan a las familias a comer un 4% menos de carne, pescado y frutas
Los hogares españoles gastaron un 5,1% más en alimentos y bebidas no alcohólicas en 2022.
29 junio, 2023 03:36Los hogares españoles consumieron en 2022 menos carne y menos pescado que en 2021. Las verduras y las frutas también redujeron su aparición en la cesta de la compra. De media, las familias comieron un 4% menos de alimentos frescos en un año en el que la inflación mermó su poder adquisitivo.
Pese a la caída, el gasto en estos productos, lejos de reducirse, se incrementó al pasar por caja en el supermercado. Los hogares españoles desembolsaron, de media, 5.050 euros anuales en alimentos y bebidas no alcohólicas en 2022, un 5,1% más que el año anterior, como apunta la Encuesta de Presupuestos Familiares (EPF).
Las familias españolas se dejaron 244 euros anuales más en el supermercado y la culpable fue la inflación. El IPC cerró 2022 en el 5,7%, desbocado hasta el 15,7% en los alimentos y las bebidas no alcohólicas, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).
La partida en alimentos y bebidas no alcohólicas, con esos 5.050 euros, tuvo un peso del 16% en el gasto medio familiar de 2022. En total, los hogares españoles gastaron 31.568 euros el año pasado.
Ese desembolso fue un 7,9% superior al de 2021 y recuperó los niveles previos a la pandemia. Sin embargo, sin el efecto de la inflación, el incremento quedó en el 2%, según la EPF.
Más caros y más gasto
El consumo de carne de cerdo cayó en 2022 un 7,6% mientras que el de carne de ovino y caprino se desplomó un 20,8%. Sin embargo, el gasto en carne, de cualquier tipo, repuntó un 0,46%.
Los hogares españoles se dejaron en la compra de carne 1.100,07 euros en 2022. La explicación entre el descenso del consumo y el aumento del desembolso está en la inflación, ya que los precios de este producto, ya sea vacuno, porcino, ave, caprino, ovino o cualquier otro tipo, se dispararon casi un 13% en 2022. Así, los españoles pagaron más por menos kilos de carne.
Este patrón se repite en las frutas y en las hortalizas. La inflación encareció las frutas frescas un 7,3% en 2022. El resultado fue una caída del consumo del 6,37% de media. A la hora de elegir, las familias españolas renunciaron con más frecuencia a los cítricos, cuyo consumo menguó un 7,6%, y a las peras, con un descenso del 9,8%.
Sin embargo, esas decisiones de compra no sirvieron para contribuir al ahorro familiar. El gasto en frutas aumentó un 2,46%, hasta los 523,46 anuales, de media en 2022.
Los hogares españoles destinaron un monto similar a la compra de legumbres y hortalizas. Al año, las familias se dejaron 553,72 euros, un 5,35% más que en 2021.
Esa partida rindió poco en el supermercado y se notó, en concreto, en la compra hortalizas como tomates, judías verdes o calabacines. En 2021, los hogares españoles comieron 58,5 kilos de estos productos. Un año después, con la inflación de estos artículos en el 12,3%, el consumo cayó a 54,9 kilos, un 6,2% menos.
Menos consumo de pescado
Las familias españolas también limitaron en su dieta el pescado y el marisco, sobre todo fresco. Los precios fueron, de nuevo, la razón principal, con un encarecimiento superior al 7% en 2022.
El consumo de pescado fresco se redujo un 9,8%, mientras que el del marisco cayó un 14,1%. Estos alimentos son los únicos en los que se contrajo el gasto. Los hogares pagaron, de media, 573,43 euros por estos productos, un 3,06% menos que en 2021.