Tras la rebaja de previsiones económicas del Gobierno, se avecina una nueva tanda de revisiones a la baja sobre la evolución del PIB en 2022. Este miércoles, el Banco de España anunció que ultima ese recorte y este jueves, el panel de Funcas ha revisado a la baja en medio punto su estimación de crecimiento para este año, hasta el 4,3%.
Dentro del panel de 19 casas de análisis, hay ocho firmas que están por debajo del consenso y tres de ellas que pronostican un crecimiento inferior al 4%. Frente a ellas, cuatro panelistas son más optimistas que esa media.
Llama la atención el pesimismo que arrojan los economistas en su análisis del entorno económico internacional, ya que el consenso considera que o se mantendrá en la situación actual o irá a peor en los próximos meses.
En clave interna, la falta de fuelle del consumo está detrás de esta rebaja. Según explica Funcas, la demanda nacional aportará 3,3 puntos al crecimiento, ocho décimas menos de lo esperado en marzo.
Tampoco es positivo el dato de inflación, que se ha revisado en un punto y medio al alza. Pese a que los panelistas esperan una moderación de la inflación en 2023, señalan que el alza de la inflación subyacente (la que no incluye los precios de la energía, ni los alimentos más volátiles) apunta a "una traslación intensa de los mayores costes de producción".
Así, esperan que la inflación media para este año se sitúe en el 6,9% y que en diciembre, la tasa interanual todavía sea del 4,3%, mientras que en 2023 la media anual sería del 2,2%. Para la inflación subyacente, esperan una media del 3,6% este año y del 2,4% en 2023.
En este contexto, Funcas no se cree las previsiones de reducción de déficit del Gobierno. El panel prevé una reducción hasta el 5,5% este año y hasta el 4,8% en 2023. Esto supondría una desviación de cinco y nueve décimas respectivamente frente a la previsión del Ejecutivo.
En el mercado laboral, esta situación económica llevará a una desaceleración del empleo, según el panel, que ha restado seis décimas al crecimiento del empleo este año y dos décimas a la caída de la tasa de paro, que ahora se sitúa en el 13,2%.