Muchos podrían pensar que es una rara avis en el Tercer Sector si tenemos en cuenta la tímida presencia de la digitalización o la innovación tecnológica entre las entidades sin ánimo de lucro. Pero itwillbe.org es el claro ejemplo de que la innovación social puede apoyarse e, incluso, tener su razón de ser en la tecnología.
Así lo creía Arancha Martínez, la fundadora de itwillbe.org que un día decidió abandonar su trabajo en banca de inversión para responderse a sí misma a una solo pregunta: "En un mundo en el que la tecnología está solucionando tantos problemas, ¿por qué la tecnología no ayuda a acabar con la pobreza?".
Una duda que quiso responder ella misma y que llevó al nacimiento de esta ONG que, como ella misma explica, quiere "contribuir a acabar con la pobreza a través de la "solidaridad eficiente". "Innovamos para afrontar los mayores retos sociales a través de la colaboración y la tecnología. Llevamos la innovación tecnológica allí donde más se necesita", afirma
Y todo apunta a que lo ha conseguido: La innovación tecnológica ha permitido a itwillbe.org, desde 2008, dar educación gratuita y de calidad a más de 6.888 menores; proteger a 4.500 menores en situación de calle de las mafias; empoderar y ayudar a 448 mujeres con microcréditos y con formación profesional a 89, y reducir en un 45% el trabajo infantil, en 2019, en la ciudad de Passor (India).
Tras estos números, la base la encontramos en el desarrollo de tecnología por y para el sector social que ha logrado itwillbe.org.
Biometría y blockchain para erradicar la pobreza
Combatir la pobreza con la innovación social es el objetivo de esta organización y la tecnología su vehículo.
Una filosofía gracias a la que, por ejemplo, itwillbe.org sorprendía al Tercer Sector en 2016 con el desarrollo de PPa-People’s Protection App, una aplicación móvil que aplica la biometría de rostro, manos y huella dactilar a la identificación y protección de los niños vulnerables.
Y es que tan solo en la India, uno de los países epicentro de la acción de itwillbe.org, se estima que diez millones de menores viven en situación de calle en India.
Poder identificarlos, para así ayudarles, era uno de los grandes desafíos a los que se enfrentaba la organización. "Se estima que un 20% de la población mundial es invisible al no tener una identificación que acredite sus derechos", explica Arancha Martínez. Un desafío que debían solventar para poder realmente hacer llegar su ayuda de una forma eficaz a quién la necesitaba.
De nuevo una pregunta le daría a la fundadora de itwillbe.org la respuesta: "Pensé en cómo, en el sector de la banca, se gestionan las identidades y la respuesta estaba clara: con biometría. ¿Por qué no aplicarla también en nuestra labor social?".
Dicho y hecho, la organización desarrollaba esta app, un proyecto "en sí innovador" puesto que es la primera vez que se utiliza la biometría palmar (muy fiable en menores) en el ámbito social y en movilidad.
"Sin embargo, siempre digo que lo que me parece innovador es ser capaz de construir un modelo colaborativo, una herramienta diseñada en colaboración con ONG en España y en terreno, totalmente adaptada a las necesidades de nuestro sector y que ahora podamos compartirla para impactar cada una es su ámbito geográfico", destaca.
Y es que, actualmente, PPa-People’s Protection App está siendo utilizada por las ONG de la red ChildMISS de protección de infancia en la India y también se está replicando este proyecto en Senegal y Sierra Leona junto a ONG como Coopera ONGD, Fundación Xaley, Childheroes y Unicef.
Uso del blockchain
La innovación también está detrás de otro de los grandes desarrollos de itwillbe.org, la utilización de blockchain.
"Fuimos la primera ONG en usar tecnología blockchain en España y precisamente montamos la empresa ComGo en cuanto vimos su enorme potencial, para hacerla llegar al resto de ONG y empujar un cambio que creemos imprescindible para progresar como sector. Si hay un sector que necesita generar confianza ese es el Tercer sector. Si existe una tecnología que permite traza en tiempo real el destino de los fondos y el impacto generado, ¿cómo no va a adoptarla? Me parece de cajón", señala.
Blockchain para ser más transparentes y, por tanto, generar más confianza e incrementar los ingresos; biometría para evitar duplicidades y, por tanto, ser más eficientes en los programas; Inteligencia Artificial para mejorar el match entre recursos y necesidades; Machine Learning para ir comprendiendo mejor, por ejemplo, los perfiles de voluntariado para incrementar el éxito en la experiencia y que su trabajo tenga mayor impacto….
"Estamos investigando y pilotando con pocos recursos. Ojalá más entidades con más posibilidades se animen a explorar, o seamos capaces nosotros de atraer inversión social y filantropía para seguir con nuestra misión", explica Arancha Martínez que, hace un claro llamamiento a la colaboración entre entidades.
"Creo que nuestro sector haría maravillas si colaborásemos mucho más. Seríamos más eficientes, no duplicaríamos esfuerzos, aprenderíamos los unos de los otros y por tanto el impacto social sería mucho mayor", asegura.
Sabe que el camino no es fácil y que aún son muchas las barreras especialmente culturales que tiene el Tercer Sector a la hora de adoptar la innovación tecnológica como un aliado.
"Hay mucha resistencia al cambio y muchas dudas éticas, y con razón porque efectivamente hay una cara muy peligrosa de la tecnología que hay que conocer muy bien. Aún no hay un posicionamiento claro en cuanto al uso de tecnologías en el sector. De hecho, en pocos códigos éticos se habla de ello todavía. Actualmente el acceso a tecnologías sofisticadas no es caro. Se puede pagar por uso, hay modelos a éxito, incluso herramientas gratuitas", explica.
Sin embargo, añade que las entidades no acaban de adoptarlas porque "en muchos casos suponen cambios en la manera de gestionar recursos, de organizarse como plantilla, incluso supone cambios de perfiles/talento y es algo que en un sector que pone en el centro a las personas entiendo que cuesta". "Es cierto que en mi opinión hay que hacer la reflexión como sector de si no estamos primando al empleado frente al beneficiario", resalta.
Plataforma Stopcovid.io
Dejó la dirección de itwillbe.org para centrarse en impulsar y escalar PPa y ComGo al máximo de organizaciones. ¿Su última aventura? Stopcovid.io, una plataforma lanzada por ComGo e IBM, basada en tecnología Blockchain para gestionar de forma transparente las donaciones hacia afectados por el coronavirus en España.
"Durante la crisis del Covid, en apenas unas semanas conseguimos que más de 130 ONG (actualmente la cifra se eleva a 300) se han formado en blockchain y se hayan registrado en una plataforma, que cuenta ya con los agentes más relevantes del ecosistema de impacto y Tercer Sector. Naciones Unidas reconoció el esfuerzo y estamos actualmente viendo con ellos cómo ir al siguiente nivel", resalta.
En este sentido, apunta que están en conversaciones con grandes donantes, Administración Pública y ONG para que Stopcovid.io pivote hacia un marketplace de la filantropía y tenga impacto mucho más potente. Un ecosistema totalmente disruptivo, transparente al 100%, donde podamos "ordenar la solidaridad", incrementarla y de manera colaborativa generar más impacto.
"No es un objetivo fácil. Pero es mi propósito para este año. Y si lo conseguimos podemos ser un referente para que Naciones Unidas lo escale a otros países. ¡Sería un sueño como emprendedora española y tenemos la oportunidad de hacerlo! No vamos a acabar con la pobreza, pero podemos contribuir enormemente. Merece la pena intentarlo", asegura.