Autobuses con 'ojos', lo último en la transformación digital del transporte público de Madrid
El proyecto testado en Valdemorillo se suma al más del medio centenar de sistemas inteligentes que implanta el Consorcio Regional de Transportes.
11 septiembre, 2021 02:43Noticias relacionadas
En un sector, el de la movilidad, cada vez más automatizado y enfocado a mejorar la seguridad de vehículos y peatones, la tecnología comienza a ser la pieza clave de cualquier red de transportes.
En este sentido, son los grandes nodos de transportes regionales los que están haciendo grandes esfuerzos para que moverse en autobús o metro sea una experiencia totalmente diferente a lo que estamos habituados.
Un ejemplo se está viendo en Madrid. Esta misma semana se ha conocido un nuevo proyecto que está implantando el Consorcio Regional de Transportes en Valdemorillo, localidad ubicada al noroeste de la capital. La visión artificial es la tecnología protagonista.
El objetivo de base de este proyecto es facilitar el paso de las líneas 641, 642, 645, 669, 669A y 630, que atraviesan la localidad y, a su vez, garantizar la seguridad de los peatones.
La solución prevista era la creación de un carril reversible, es decir, que una calle de un único sentido pudiera asumir el paso del autobús en sentido contrario -un trazado que cumpliría con el objetivo fijado-.
Pero ¿cómo hacer esos cambios de dirección cada vez que se esté acercando un autobús interurbano? Como suele suceder en estos casos, la tecnología tiene la respuesta.
El primer elemento tecnológico será un localizador instalado en el parabrisas de cada uno de los autobuses que realizan los trayectos mencionados. Estos localizadores serán detectados por unas antenas que, a su vez, se conectarán al tercero de los elementos necesarios, las balizas inteligentes.
Estas balizas advertirán de la llegada de un autobús interurbano y cerrarán al tráfico el primero de los semáforos. Mediante visión artificial, se comprobará que la calle está despejada antes de revertir el carril para el paso del autobús.
Una vez que este autobús recorra el tramo, se revertirá el sentido de la circulación al estado inicial. El peatón igualmente contará con seguridad adicional, ya que los pasos de cebra se iluminarán de rojo advirtiendo al transeúnte que debe extremar la precaución a la hora de cruzar.
Los semáforos que se han instalado se asemejan a los que utilizan los tranvías, con una franja rectangular iluminada en horizontal prohibiendo el paso o en vertical permitiéndolo. De esta manera solo afectará a los autobuses de línea regular no permitiendo el paso de otro tipo de vehículos.
El proyecto tecnológico se enmarca en la línea estratégica de planificación y gestión inteligente del Consorcio Regional de Transportes de Madrid.
El consejero de Transportes e Infraestructuras, David Pérez, ha recordado que "el Consorcio Regional de Transportes está implantando más de 50 sistemas de innovación y transporte inteligente en la región que contribuyen a dinamizar y resolver pequeños problemas en el tránsito de vehículos, mediante soluciones tecnológicas que mejoraran nuestra red de transporte público".
La red madrileña de autobuses también ha sido beneficiaria de otra disrupción tecnológica, en este caso para favorecer la inclusión de personas con dificultades de visión. El proyecto ha sido implantado por primera vez en Alcobendas.
Se trata de un nuevo sistema de señalización e información que facilita a las personas con discapacidad visual obtener información contextualizada y accesible en las más de 7.300 paradas de autobuses con las que cuenta el Consorcio Regional de Transportes.
Este nuevo servicio funciona mediante una aplicación móvil gratuita donde el usuario accede a dicha información mediante un código denominado NaviLens. Este código permite una lectura a grandes distancias. Se trata de un sistema superior a los códigos QR o de barras, capaz de realizar una lectura angular de hasta 160 grados y con una capacidad de lectura ultrarrápida.
La empresa Clear Channel, desarrolladora de este sistema, explica que el usuario, a través de su terminal telefónico y activando la cámara, detecta los códigos instalados en las paradas de autobús.
Con solo agitar la muñeca, se activan los detalles contenidos en cada una de las etiquetas, obteniendo información sobre transporte público, instalaciones y posibles obstáculos que puedan ser peligrosos.
El consejero David García, además, destaca la renovación total del actual parque de marquesinas y postes de paradas, con la instalación de más de 8.750 nuevas y la remodelación de otras 500, "incluyendo soluciones innovadoras en sostenibilidad, así como mejoras en la digitalización y accesibilidad a gran escala".
Otra de las mejoras que tendrán las marquesinas es la instalación de pantallas digitales y WiFi gratuito en más de 50 puntos y 50 parkings de bicicletas, incorporando la iluminación con tecnología LED en todas las marquesinas del Consorcio Regional de Transportes.
La red de Metro de Madrid, una de las más importantes del mundo, también está intentando estar a la vanguardia tecnológica.
Fuentes de la Comunidad de Madrid explican que la región "continúa con su compromiso de ofrecer el mejor servicio al cliente y consolidar nuevos productos basados en la tecnología de Industria 4.0 y big data, que permiten proporcionar más información y prestaciones a los viajeros".
Este verano, sin ir más lejos, el Consorcio Regional de Transportes ha anunciado la extensión del modelo 4.0 a las once estaciones de metro con mayor afluencia de viajeros.
Para ello, ha modernizado 170 equipos de peaje en once de las estaciones de la red de Metro de Madrid que presentan una mayor afluencia de viajeros. Los tornos, similares a los recientemente instalados en la nueva estación de Gran Vía, cuentan con una novedosa tecnología que implica mejoras en materia de información al viajero y accesibilidad.
La empresa pública Metro de Madrid comenzó la modernización de los tornos de sus estaciones con los instalados en la estación de Gran Vía, reabierta el pasado mes de julio, tras una serie de obras de remodelación.
Esta estación cuenta con 17 modernos equipos de control de validación, patentados por Metro de Madrid -de los que seis están destinados a usuarios con movilidad reducida- distribuidos en dos vestíbulos.
Estos modelos ocupan menos espacio que los tradicionales, disponen de una interfaz más intuitiva y una pantalla que informa al usuario sobre la validación del título de transporte empleando gráficos y texto en el lector sin contacto y en el suelo, además de Iluminación LED en las puertas, para informar al viajero sobre el resultado de la validación.
El proyecto ha supuesto una intervención sobre los elementos físicos y el software de los equipos para acomodarlos a la nueva tecnología definida por el modelo de estación 4.0. La adaptación se ha centrado en la zona de validación, donde se han ubicado pantallas TFT (Thin Film Transistor) de 10 pulgadas y lectores con iluminación, lo que permite un sistema de validación fácil, entendible y visible.
Además, ofrece un código de colores para que los clientes sepan en todo momento el estado en el que se encuentra el equipo y si la validación de su título de transporte a la hora de acceder a la estación ha sido correcta o existe algún tipo de problema.
También ofrece la posibilidad de dar mensajes sobre la situación de la Tarjeta de Transporte Público (TTP), su validez y billetes pendientes en la misma.