Mucho más que Chamartín: así se transformará la movilidad del norte de Madrid
Tres nuevas estaciones de Metro y una de Cercanías se sumarán a las ya existentes y serán potenciadas por una línea de autobús.
25 agosto, 2021 02:02Noticias relacionadas
Madrid encara el periodo en el que sufrirá la transformación más profunda de su historia. El desarrollo de Madrid Nuevo Norte cambiará los actuales flujos tanto de residentes, como de trabajadores y turistas de la capital de España. Una mutación en la que la estación de Chamartín funcionará como nodo principal pero que contará con varias actuaciones del mismo calado que la renovación de la histórica instalación ferroviaria.
El diseño del proyecto señala que, una vez terminado, 10.500 nuevas viviendas alojarán a más de 27.000 personas y habrá un espacio de nuevas oficinas que tendrán capacidad para 100.000 trabajadores. A esto hay que añadir los millones de desplazamientos que, diariamente, realizarán los ciudadanos y visitantes de la ciudad entre el aeropuerto, el resto de distritos del norte y el centro de la ciudad.
Al igual que las cifras del proyecto son importantes en lo que respecta a edificios residenciales y de negocios, lo referente a la movilidad no se queda atrás. Contará con tres nuevas estaciones de metro: Fuencarral Norte, Fuencarral Sur y Centro de Negocios. Estas instalaciones conectarán, directamente, con las actuales líneas 1 y 10 a lo que sumarán una nueva línea dedicada.
A ello se añadirá la nueva estación de Cercanías de Fuencarral. Además, se creará un nuevo intercambiador en la Paz por el que circularán hasta 50 líneas de autobuses a los que se sumará el nuevo bus prioritario. Una iniciativa que pretende vertebrar el transporte colectivo en superficie de esta zona.
Objetivo: 10 minutos a pie
Todos estos desarrollos pretenden facilitar el acceso de trabajadores y habitantes de las nuevas instalaciones proyectadas. En concreto el objetivo es que el 95% de los vecinos y trabajadores de Madrid Nuevo Norte cuenten con una estación de transporte público a menos de 10 minutos a pie.
Esta amplia red de transporte público, estructurada en torno a múltiples centros de actividad urbana, tendrá en su eje a la conexión de alta velocidad ferroviaria de la Estación de Chamartín. Un punto que será clave para las conexiones ferroviarias de alta velocidad tanto de los corredores norte como sur gracias a la puesta en marcha de un túnel que unirá Chamartín con Atocha.
Además, el avión también estará presente en el proyecto. Chamartín contará con una unión de alta velocidad con el aeropuerto de Barajas. Con ella, se busca impulsar las conexiones nacionales ferroviarias para dejar al transporte aéreo la tarea de las rutas intercontinentales.
Apuesta por la sostenibilidad
Este diseño pretende impactar de forma notoria sobre las emisiones contaminantes. Según los datos facilitados por Distrito Castellana Norte, la nueva red de transporte público multimodal perseguirá que, al menos, el 80% de los desplazamientos en la zona sean sostenibles.
A ello se sumará la implantación de una gran infraestructura verde que conecta la ciudad con el espacio protegido de la Cuenca Alta del Manzanares, creando un ecosistema propio y por el que se quiere proteger el ciclo integral del agua. Asimismo, el proyecto prevé la puesta en marcha de barrios energéticamente positivos impulsando la generación de energías renovables y la creación de redes distritales de frío y calor.
Así las cosas, las próximas décadas serán testigo de una profunda mutación de la movilidad madrileña. Una serie de cambios y actuaciones que afectarán al día a día de millones de ciudadanos que por trabajo u ocio transitará el norte de Madrid. Un cambio que, para producirse, deberá apoyarse en una estrategia de movilidad que permita dar sentido a los actuales y los nuevos flujos de personas de una de las zonas más tensionadas de la capital.