Mejores salarios, un alivio para todos
Cuando estalló la burbuja de las criptomonedas fue un shock. FTX, en el ojo del huracán, era la empresa que patrocinaba el estadio de los Miami Heat. Algo más que un estadio, un símbolo de la ciudad. Durante más de una década fue el American Airlines Arena, el lugar donde Lebron James coleccionaba anillos. Casi nada.
Ese patrocinio no significa solo publicidad y dinero para el equipo, también para la zona. Parte de esos ingresos iban para programas sociales de Miami Dade County, el condado donde está Miami, similar a una comunidad autónoma en España, por poner un poco de contexto. Ayudas al estudio, transporte y comedores sociales en peligro.
Llegó al rescate Kaseya, una empresa de servicios de IT, soporte informático. Poco sexy, pero sólida, con raíces en la zona. Estas raíces se están haciendo más sólidas y es un hecho importante para dicha área.
Acaban de anunciar que van a crear 3.400 puestos de trabajo en el condado con un salario anual medio de 107.000 dólares. No es relevante solo por la cantidad que van a pagar, sino también porque sirve para que otros tengan que competir. Una de las quejas más habituales, fundadas, es que el coste de vida es cada vez mayor. Especialmente los alquileres.
Kaseya cuenta con 4.000 empleados en todo el mundo y 15 oficinas para dar servicio a 45.000 clientes. En 2019 levantó una ronda de 500 millones de dólares, un acceso directo al selecto club de las startups unicornio.
La vuelta del hijo pródigo
Keith Rabois, leyenda de Silicon Valley, uno de los fundadores de LinkedIn, dio el salto a Founders Fund, inversores en Affirm, DoorDash y OpenDoor, por destacar algunos de los éxitos, se convirtió en bandera del movimiento tech en Miami cuando mudó a casi todo el equipo.
Sus fotos con el alcalde, la asistencia a fiestas y eventos y sesiones de crossfit, fueron la comidilla en Twitter. Cuatro años después, dejo su fondo para volver a Khosla Ventures, el fondo de Vinod Khosla, de 68 años, otra leyenda del Valle, multimillonario que ha convertido en millonarios a muchos de los que le han seguido.
¿La cuantía del fondo? 3.100 millones de dólares. Una cantidad muy grande como para no soñar en cómo desplegarlo.
La vuelta de Keith Rabois a Silicon Valley no significa que muera el ecosistema de Miami. Los Draper, tercera generación de inversores, con sus raíces bien enterradas en Redwood City, llegarán pronto a la capital del Sol para grabar su séptima temporada. Lo hacen para dar exposición a través de su reality de emprendedores y también invertir. Una mezcla de Shark Tank, Gran Hermano y clases sobre cómo funciona el venture capital. ¿El Premio? Un millón de dólares de inversión.