Iberdrola, liderando la realidad del hidrógeno verde en España
La compañía energética enarbola 60 proyectos para responder a las necesidades de electrificación y descarbonización de sectores como la industria o el transporte pesado.
14 enero, 2022 03:02España y la Unión Europea avanzan en la electrificación de sus economías para lograr la plena descarbonización. La aportación de la electricidad al consumo energético hoy apenas supera el 20% del total y debería multiplicarse casi 3 veces en solo 30 años si se quiere cumplir los objetivos climáticos.
No obstante, existen algunos consumos energéticos que, por razones tecnológicas, son difícilmente electrificables, como los procesos industriales de alta temperatura o el transporte pesado. Para ellos, la producción de hidrógeno verde a partir de la electrólisis -utilizando energía renovable- es un factor clave en la senda hacia la neutralidad climática en 2050.
Conscientes de este desafío, pero también de esta gran oportunidad, la Unión Europea y el Gobierno de España han puesto en marcha estrategias para impulsar el hidrógeno verde. La UE aspira a contar con 40 GW de electrolizadores de hidrógeno verde en tan solo diez años mientras que en España el objetivo es de 4 GW de potencia instalada.
El hidrógeno en procesos industriales
Iberdrola -al igual que hizo con las renovables hace ya 20 años- se sitúa al frente del nuevo reto tecnológico que supone la producción y suministro de hidrógeno a partir de fuentes de energía limpias. La compañía es la primera en hacer realidad el hidrógeno verde, con más de 60 ambiciosos proyectos en dos ámbitos principalmente: uso industrial y transporte pesado.
En nuestro país, la compañía desarrolla la mayor planta de hidrógeno verde para uso industrial de Europa. Utilizará electricidad 100% renovable en el proceso de electrolisis para la producción de amoniaco para fertilizantes. El hidrógeno verde producido se usará en la fábrica de amoniaco de Fertiberia en Puertollano (Ciudad Real) y se completará en posteriores fases en Palos de la Frontera (Huelva) y en el propio Puertollano, y que contemplan el desarrollo de 800 MW de hidrógeno verde, con una inversión total de 1.800 millones de euros en los próximos seis años.
Otro de los acuerdos firmados recientemente es el de Iberdrola y H2 Green Steel para construir una planta de hidrógeno verde de 1.000 MW de capacidad instalada con una inversión estimada en 2.300 millones de euros. La nueva planta alimentará con combustible limpio un horno de reducción directa de acero con capacidad para producir unos 2 millones de toneladas al año de acero puro verde, con una disminución del 95% de las emisiones de CO2.
El emplazamiento se situará en la Península Ibérica, donde actualmente se barajan varias posibles ubicaciones, con la intención de que la producción comience en 2025 ó 2026. Todas las ubicaciones que H2 Green Steel e Iberdrola están evaluando tendrán acceso a energía renovable, así como a toda la infraestructura necesaria para operar con éxito un negocio de hidrógeno, acero verde.
Iberdrola está también involucrada en la descarbonización de otros procesos industriales, materializada en acuerdos como el alcanzado entre Bp, Iberdrola y Enagás para estudiar el desarrollo del mayor proyecto de hidrógeno verde en la Comunidad Valenciana. El propósito de esta alianza es evaluar la instalación de un electrolizador para la generación de hidrógeno verde en los terrenos propiedad de Bp en un polígono industrial de Castellón, El Serrallo.
Con Porcelanosa, Iberdrola también estaría trabajando en la primera solución a escala real para electrificar la producción cerámica, combinando renovables, hidrógeno verde y bomba de calor. La iniciativa tiene un doble objetivo. Por un lado, el aprovechamiento energético y la reducción de emisiones de CO2 mediante el desarrollo de un sistema de uso acoplado de hidrógeno verde y bomba de calor que se implementará en un horno de la fábrica de Porcelanosa en Vila-real. Una solución que busca optimizar la energía térmica residual sustituyendo hasta la mitad del gas natural como combustible por hidrógeno verde.
Por otro lado, el proyecto contempla la incorporación en las instalaciones de Porcelanosa de un electrolizador, alimentado por una planta fotovoltaica para la producción de hidrógeno verde. También se incluirá una estructura tecnológica que aprovechará el exceso de calor residual y de las líneas de producción mediante sistemas de alta eficiencia.
En su ruta de descarbonización también está trabajando con Foresa para analizar el desarrollo de inversiones en hidrógeno renovable para la producción industrial de metanol verde en Galicia. Ambas compañías podrían abordar la construcción de una planta de hidrógeno verde de 20 MW -ampliable a 200 MW-, obtenido por electrólisis con energía renovable, así como la instalación de equipos de captura de CO2 procedente de plantas de combustión de biomasa, incrementando así su ya importante carácter de capturador carbono.
El transporte pesado a través del hidrógeno
Otra de las alternativas en las que se puede aplicar el hidrógeno verde es en el transporte pesado para su descarbonización. En este sentido, Iberdrola realizará más de 20 proyectos de hidrógeno en el ámbito de la movilidad, tanto del transporte urbano pesado, como en el desarrollo de una red de abastecimiento en polos logísticos o proyectos en puertos.
Un hito fundamental en el sector del transporte es la Red Transeuropea de Transporte basada en el Hidrógeno verde. Se configura como un conjunto planificado de redes prioritarias de transporte pensadas para facilitar la comunicación de personas y mercancías a lo largo de toda la Unión Europea.
En esta propuesta sobre la red de carreteras española está incluido todo el Corredor Mediterráneo hasta Málaga, la conexión viaria del norte de España con la red europea a través de la Y vasca del H2, la conexión del levante con Badajoz, posibilitando la conexión con Lisboa, además de diferentes carreteras radiales desde Madrid.
A lo largo de estos corredores, Iberdrola desplegará, en lugares clave, plataformas logísticas destinadas al transporte por carretera -19 polos logísticos, entre ellos Zaragoza, Murcia y la Comunidad Valenciana- para el abastecimiento principalmente a flotas de transporte pesado por carretera.
El proyecto es, asimismo, complementario al que se ha puesto en operación en la Zona Franca de Barcelona, donde durante diez años una hidrogenera dará servicio a los autobuses de Transports Metropolitans de Barcelona (TMB) y otras flotas e industrias del polígono. Esta hidrogenera es la primera instalación de uso público que se ha puesto en servicio en España.