Un juez pide informes sobre cómo ETA "adoctrinó" a sus miembros y del reparto de armas y bombas a los comandos
Lo ha solicitado el instructor de la causa en la que se investiga el rol de varios jefes de ETA, como 'Josu Ternera', en el atentado contra la T-4.
Más información: El juez investigará a Josu Ternera y otros tres líderes de ETA por el atentado de la T-4 de Barajas en 2006
Un juez de la Audiencia Nacional ha ordenado a la Guardia Civil y a la Policía que elabore sendos informes sobre, entre otros asuntos, la "fuerte interiorización" por parte de los miembros de ETA de los postulados de la banda y acerca de cómo se producía su "adoctrinamiento".
También, sobre la forma en que la cúpula de la banda decidía cómo se repartían entre los comandos las armas y bombas y del "funcionamiento logístico de ETA en lo relativo a materiales explosivos".
Así consta en una reciente resolución firmada por el juez Francisco de Jorge, titular del Juzgado Central de Instrucción número 1 de la Audiencia Nacional. Este magistrado investiga el rol que tuvieron los jefes de ETA en el atentado que la organización terrorista cometió en 2006 contra la T-4 del Aeropuerto de Barajas.
De hecho, en su encomienda a la Policía Nacional y a la Guardia Civil, De Jorge también les solicita "los indicios y documentos que permitan afirmar que [este ataque] fue considerado por la propia zuba [comité directivo de ETA] como la forma de respuesta" con la que la banda terrorista rompió su tregua con el Gobierno de España.
El atentado contra la T-4 se produjo el sábado 30 de diciembre de 2006. En él, murieron dos personas y varias decenas resultaron heridas.
El ataque también provocó cuantiosos daños en las infraestructuras y retrasó varios vuelos. Con él, ETA rompió el alto al fuego que había acordado poco antes con el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero.
Ahora, el juez De Jorge investiga a cuatro miembros de la banda que componían su cúpula directiva, denominada zuba. Entre ellos, se encuentra José Antonio Urruticoextxea (conocido por el sobrenombre de Josu Tenera).
Esta causa se inició con la admisión a trámite de la querella presentada por la asociación de víctimas Dignidad y Justicia y dirigida contra estos etarras, debido a su capacidad de mando en la jerárquica banda terrorista. La querella les consideraba algo así como los autores intelectuales del ataque, debido a su dominio de ETA y su influencia sobre los miembros que ejecutaban los atentados.
De hecho, fue Dignidad y Justicia la acusación que solicitó a De Jorge que la Guardia Civil y la Policía elaborasen informes sobre los asuntos mencionados, así como que los agentes aporten información sobre la composición y el funcionamiento de la zuba cuando se produjo el atentado de la T-4.
De hecho, el magistrado ha pedido a la Comisaría General de Información y a la Jefatura Superior de Información que detallen, "nombre a nombre", quiénes eran sus miembros y lugartenientes "en el último trimestre de 2023".
El juez también ha solicitado los documentos que acrediten el "carácter fungible" de los miembros de ETA que ejecutaban los ataques; es decir, su carácter "intercambiable", en contraposición con el de los miembros de la zuba, más estables en sus funciones y quienes, según Dignidad y Justicia, decidían cómo, cuándo y contra quién iban a producirse ciertos atentados.
'Josu Ternera'
Por otro lado, en otra resolución a la que ha tenido acceso EL ESPAÑOL, el juez De Jorge prorroga seis meses la investigación de esta causa.
El instructor señala que, además de estar a la espera de los informes policiales ya encargado, pretende interrogar, como investigado, a Josu Ternera, uno de los jefes de ETA contra los que se dirigía la querella.
También citará a declarar al resto de dirigentes que señaló Dignidad y Justicia: Airtzol Iriondo (apodado Gurbitz), Mikel Carrera Sarobe (Ata) y Ainhoa Ozaeta (Kuraia).