El juez rectifica y acepta investigar unos chats en los que dos exetarras planifican 'ongi etorris'

El juez de la Audiencia Nacional Manuel García-Castellón ha corregido su decisión de dar por finalizada la investigación sobre los homenajes a presos de ETA y ha ordenado investigar unos chats en los que dos históricos exetarras colaboraban en la planificación de estos ongi etorris.

Se trata de unas conversaciones en la app de mensajería Telegram de las que formaban parte los investigados Carlos Saez de Eguilaz Murgiondo y Felipe San Epifanio San Pedro (apodado Pipe y antiguo miembro del comando Barcelona).

Así consta en un auto al que ha tenido acceso EL ESPAÑOL, en el que García-Castellón califica de "prematuro" el fin de la instrucción que él mismo decretó. De esta forma, da la razón a la asociación de víctimas del terrorismo Dignidad y Justicia, al Partido Popular y a la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) que habían solicitado al juez que se desdijese y prorrogase la investigación para practicar esta diligencia. La Fiscalía, por contra, se había opuesto a sus recursos.

Por ello, el magistrado, titular del Juzgado Central de Instrucción número 6 de la Audiencia Nacional, ordena a la compañía tecnológica Telegram que informe "de la titularidad" de varios de sus canales, en los que participan los dos investigados ya citados.

"Deben estimarse los recursos planteados, que ponen de manifiesto la necesidad de revocar la resolución impugnada, puesto que la práctica de las diligencias interesadas [investigar los chats] se consideran útiles, necesarias y pertinentes para el esclarecimiento de los hechos investigados en la presente causa", reza la resolución.

Al analizar los móviles de Saez de Eguilaz y de San Epifanio, la Policía descubrió que ambos participaban en un canal de Telegram llamado Sortu-Avivar el ritmo de nuestro pueblo y que estaría administrado por el partido Sortu, la formación mayoritaria que forma parte de la coalición abertzale EH Bildu. A ella pertenecen, por ejemplo, la portavoz en el Congreso de los Diputados Mertxe Aizpurua o Arnaldo Otegi.

Tal y como recuerda el juez, gracias a este canal de Telegram, el investigado Carlos Saez de Eguilaz Murgiondo, "siendo usuario, recibe abundante información sobre actos y movilizaciones y mensajes sobre la puesta en libertad de los presos de la organización terrorista ETA".

"En dicho canal se publican directrices e instrucciones relativas a la actividad en determinados ámbitos y la aplicación posterior de dichas directrices por parte de los medios de difusión de Sortu", expone García-Castellón.

El segundo de los chats que el instructor ordena investigar lleva por nombre Red ciudadana-Sé el camino y estaría administrado por la plataforma Sare, que brinda apoyo a los presos de ETA y a los terroristas fugados de España.

El auto del juez subraya que Felipe San Epifanio San Pedro se encuentra también suscrito a dos canales de Telegram en los que se publican "directrices" emanadas de Sortu y su entorno.

"Por lo tanto, ambos investigados son usuarios de canales de Telegram donde se imparten directrices e instrucciones sobre diversas cuestiones y ámbitos relacionados con los presos y fugados de la organización terrorista ETA, recibiendo abundante información y promoviendo campañas y movilizaciones a favor de los presos de la organización terrorista ETA, desconociendo quienes son los administradores de los tres canales de Telegram mencionados, dos pertenecientes al partido político Sortu y uno a la red ciudadana Sare, siendo esencial conocer tal extremo para esclarecer los hechos investigados en las presentes actuaciones", relata el juez.

Esta investigación de la Audiencia Nacional se centra en la organización de los homenajes a los presos de ETA que salen de prisión. Por estos hechos fueron detenidas cuatro personas en 2021, entre ellas el etarra Kubati, al que la Fiscalía ya ha pedido que sea juzgado, al igual que los otros dos investigados ya mencionados. A todos ellos les atribuye un delito continuado de humillación a las víctimas del terrorismo y otro de enaltecimiento de los terroristas.

En el marco de esta causa judicial se descubrieron los contactos entre el entorno de los presos de ETA y Ángel Luis Ortiz, máximo dirigente de Instituciones Penitenciarias.