El juez de la Audiencia Nacional Alejandro Abascal tomará declaración el próximo 21 de diciembre al histórico dirigente de ETA Mikel Albisu Iriarte, alias Mikel Antza, como investigado por su presunta responsabilidad en la toma de decisión de asesinar al teniente de alcalde de San Sebastián Gregorio Ordóñez el 23 de enero de 1995.
En una providencia de este mismo lunes, el responsable del Juzgado Central de Instrucción Número 1 ha dado luz verde a su declaración, que considera "idónea y pertinente" dado que Antza ha permanecido en España durante más de 45 días desde su expulsión de Francia en enero de 2019, lo que hace innecesario acudir a la ampliación de la entrega para actuar contra él.
El magistrado ha autorizado a Antza para declarar desde los juzgados de San Sebastián, a los que se ha encomendado la organización y preparación de la videoconferencia. Hasta allí deberá acudir el investigado con su defensa letrada y los abogados de las partes que estimen oportuno acudir a la sede judicial.
La Asociación Dignidad y Justicia ha convocado para el mismo día 21 a partir de las 10.30 horas una concentración en las puertas de la Audiencia Nacional, cuya sede se encuentra en la madrileña Plaza de la Villa de París. Y lo hacen, han explicado, "para defender la memoria de un líder que no pudo ser porque Mikel Antza decidió que debía morir asesinado".
En este contexto, la asociación ha destacado la "gran importancia" de la labor desarrollada por la Guardia Civil y la Policía Nacional a la hora de implicar al etarra en el asesinato del que fuera dirigente del Partido Popular. "Su responsabilidad, como jefe del aparato político de ETA, fue crucial para señalar a este gran servidor de España en el País Vasco", han lamentado.
Objetivo de ETA
A su juicio, fue "la forma de ser y actuar" de Ordóñez lo que hizo que ETA, desde su cúpula, lo señalara como objetivo prioritario. "Su liderazgo fue su sentencia de muerte, pues fue un líder de ETA - Mikel Albisu- quien señaló a Gregorio Ordónez para asesinarlo", han insistido.
La declaración de Antza llegará cinco años después de que el juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz admitiese a trámite la denuncia presentada por Consuelo Ordóñez e imputase a cinco jefes de la antigua cúpula de la banda terrorista ETA por su presunta participación en la decisión de asesinar a Ordóñez.
Fue en noviembre de 2015 cuando Pedraz dictó un auto en el que atribuía la autoría intelectual del atentado a Ignacio Gracia Arregui, alias 'Iñaki de Rentería'; Mikel Albisu Iriarte, 'Mikel Antza'; Julián Achurra Egurola, 'Pototo'; José Javier Arizcuren Ruiz, 'Kantauri'; y Juan Luis Aguirre Lete, 'Insuntza'.
La Audiencia Nacional condenó a Juan Ramón Carasatorre, alias 'Jon' y 'Zapata', Javier García Gaztelu, 'Txapote', y Valentín Lasarte como autores materiales del atentado cometido contra el concejal vasco, a quien dispararon cuando se encontraba almorzando en un bar de la capital donostiarra con la entonces secretaria del Grupo Popular, María San Gil, y otros dos colaboradores.