Francina Armengol lleva desde el 17 de agosto ejerciendo como presidenta del Congreso de los Diputados, pero apenas dos semanas teniendo que defender la Ley de Amnistía del PSOE. En un discurso trufado de referencias a ella, pero sin mencionarla, la tercera autoridad del Estado ha justificado la medida de gracia (y su desbloqueo del actual Gobierno) delante de Felipe VI, no así de los partidos independentistas, que boicotearon el acto. PP y Vox han criticado su discurso y no han aplaudido al finalizar.
"La decisión de esta mayoría parlamentaria es legítima y emana de la voluntad de los ciudadanos ejercida el 23 de julio. Distorsionar la realidad o cuestionar importantes valores democráticos, desde la opacidad de la disputa, sólo va a aumentar la desafección de la sociedad hacia las instituciones", ha defendido la presidenta. La amnistía a los líderes del procés es lo que ha posibilitado la mayoría parlamentaria tras el 23-J.
La llamada legislatura del encuentro, como llevan semanas calificándola el entorno del PSOE, ha comenzado con el separatismo boicoteando la apertura de las Cortes Generales. Los diputados de ERC, Junts, EH Bildu y BNG no asistieron al acto solemne ni al desfile militar, pero sí aparecieron sucintamente en el discurso de Armengol.
"Los representantes [de lo público] no siempre comparten la misma realidad, y que esta está sujeta a interpretaciones. Y posibilitaron que esos desacuerdos acerca de la realidad se convirtiesen en acuerdos vinculantes para el bien común", indicó, en clara referencia a esa interpretación constitucional que da pie a la amnistía y, por ende, al gran acuerdo para investir a Pedro Sánchez.
La presidenta ha destacado que la formación del nuevo Gobierno "ha necesitado de tiempo, diálogo, negociación y toma de decisiones". Precisamente, este 27 de noviembre vencía el plazo constituido por ley para que fuese elegido un nuevo presidente y se declararan nuevas elecciones generales. Sánchez lo consiguió el día 16.
En este sentido, Armengol ha reivindicado el legado de los avances sociales para "ampliar derechos y mejorar la vida de las personas [...] que nos han llevado a ser el país que hoy somos". Acto seguido, ha pasado a enumerar una larga ristra de leyes aprobadas por gobiernos del PSOE.
"La Ley General de Sanidad, de mi querido y añorado Ernest Lluch, la ley del divorcio, la despenalización del aborto o la Ley para la igualdad efectiva de hombres y mujeres. La Ley de Pensiones no Contributivas, la supresión del servicio militar obligatorio, el matrimonio igualitario, la ley de dependencia, el Ingreso Mínimo Vital o la ley de eutanasia, que han supuesto más derechos para todos y todas. O la Ley de cambio climático y transición energética, que nos ha situado como un referente", ha declarado.
Críticas de la oposición
El discurso de Armengol ha sido muy criticado por los líderes de los partidos de la posición, PP y Vox, que no han aplaudido al terminar la intervención.
El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha declarado que "es el peor discurso de un presidente del Congreso que he escuchado en mi vida". Para el popular, las palabras de la presidenta del hemiciclo han sido una "provocación" e "inadecuadas".
"Cuando los discursos son sectarios y excluyentes y vienen a levantar muros no creo que sea la manera de dirigirse y respetar a toda la Cámara", ha lamentado la secretaria general del PP, Cuca Gamarra.
Por su parte, el líder de Vox, Santiago Abascal, ha cargado contra el discurso de Armengol equiparándolo con "un mitin" de partido.
Boicot independentisa
ERC, Bildu y BNG han firmado una declaración conjunta en la que justifican su ausencia en la Sesión de Apertura Solemne de la XV Legislatura que este miércoles preside el Rey en el Congreso, a quien acusan de pretender "imponer proyectos y valores antidemocráticos" y de ser una institución impuesta por el dictador Francisco Franco.
En el texto, titulado No tenemos Rey. Democracia, libertad, Repúblicas, estas tres formaciones afirman que la monarquía es "anacrónica" e "incompatible" con los principios democráticos al ser "hereditaria y vitalicia" y que no les representa. Junts tampoco acudirá a este acto en el Congreso, aunque no ha suscrito este comunicado.
"La Monarquía española es un estamento que no responde a los valores republicanos de libertad, igualdad y democracia que tanto los ciudadanos y ciudadanas de nuestros pueblos como las mayorías sociales del Estado anhelan", afirman.
Añaden que ese "carácter antidemocrático" se ve acentuado en el caso de España por el hecho de haber sido impuesta por el dictador Francisco Franco y ser, en esa medida, una "herencia del franquismo".