Negociadores del PSOE desechan la 'vía irlandesa' de Puigdemont por incluir la "autodeterminación"
El entorno de Sánchez asegura que "eso está fuera de contexto" y que "no se tiene en cuenta en absoluto". El Gobierno apuesta por un 'plan Cataluña', dentro de un "acuerdo de legislatura".
21 septiembre, 2023 03:44No de inicio. Y no con razones. Los negociadores del PSOE encargados de avanzar acuerdos con Junts per Catalunya no tienen "en cuenta en absoluto" la llamada vía irlandesa como armazón del pacto de investidura. Los siete votos de la formación independentista catalana se están buscando en otros parámetros, porque "en ningún caso habrá nada de autodeterminación".
Así lo ha confirmado a este periódico una de las personas que aconseja a Pedro Sánchez, y que trabaja en su nombre para construir la entente. Según fuentes socialistas del Gobierno, el pacto tendrá que ser "de legislatura", y no sólo para la investidura.
Por un lado, para garantizar estabilidad al Ejecutivo de coalición que arme después el presidente reelecto. Y por otro, para que sea Sánchez el que adquiera el asiento de Moncloa, y no Carles Puigdemont el que tenga una correa con la que controlarlo.
No hay que olvidar que la base parlamentaria en la que pretende apoyarse Sánchez sólo cuenta con los 121 escaños del PSOE y los 31 de Sumar. Es decir, 152 diputados: menos incluso que los de la anterior legislatura (120 socialistas y 35 de Unidas Podemos, 155).
Además, pesa mucho en este enfoque que la oposición ha subido (hasta una suma PP-Vox de 170 escaños, desde los 141 anteriores) y hay menos grupos con los que armar mayorías. En la pasada legislatura, el PSOE podía jugar con unos y con otros, y aceptar noes hasta de sus socios de referencia si acercaba posturas con grupos distintos: así ocurrió con la reforma laboral, que rechazaron ERC (13) y Bildu (5), pero contó con el apoyo de Ciudadanos (9).
Ésa es la razón por la que los socialistas están diseñando un plan Cataluña, como ya informó este diario. Ese acuerdo, que debe ser "histórico" y valer para décadas, según las fuentes, comprendería no sólo dar el comprometido paso de la amnistía (con ese u otro nombre), sino un programa de transferencias competenciales y económicas, además de un catálogo de inversiones del Estado y otro tipo de profundizaciones en el autogobierno.
Otro armazón
De este modo, la arquitectura del pacto en la que trabaja el PSOE dice basarse en la política, el reencuentro y la búsqueda de soluciones a largo plazo. Con esa idea, Sánchez pretende no sólo tener su reelección, sino desarmar el discurso independentista por la vía de que el "alivio penal" sea un punto final al "conflicto político" que llevó al procés y, al tiempo, un punto de partida para un largo periodo de "convivencia" pacificada y mutuamente provechosa.
Los Acuerdos de Viernes Santo que firmaron el 10 de abril de 1998 Reino Unido, Irlanda y representantes de las dos comunidades de Irlanda del Norte (católicos republicanos y protestantes unionistas) se basó en el reconocimiento del "derecho de autodeterminación" de los habitantes del Ulster. Y ésa es la baza que quiere jugar el expresident fugado, dado que Irlanda del Norte no está considerado un territorio colonizado, como prevé el Derecho Internacional.
Es cierto que el desarrollo político de la vía irlandesa terminó por ser una "autodeterminación concurrente", es decir, sólo se aceptaba el cambio del statu quo si "la voluntad mayoritaria libremente expresada" de los norirlandeses fuese la "unión con la República de Irlanda". Pero siempre que el Sur también votase y aceptase un cambio constitucional, para dejar de reclamar el territorio.
La traslación al "conflicto político entre Cataluña y el Estado", explican las fuentes consultadas, sería parecida: los catalanes votarían, pero el resto de españoles también. Y ambas partes acordarían aceptar los resultados y ceder en sus pretensiones máximas.
O sea, ni independencia si el resto de España no quiere, ni continuar como estamos... una vía, admite el entorno separatista, a la "confederación con puerta de salida".
"Nada de autodeterminación"
Pero los enviados del PSOE lo rechazan de plano. "Está completamente fuera de contexto", apunta el negociador ya citado. "No estamos en eso", añade un miembro del Consejo de ministros en funciones, en referencia a la autodeterminación.
El equipo negociador de Sánchez, el presidente del Gobierno en funciones en busca de su reelección, es difícil de localizar. Al menos, el que trata directamente con Puigdemont y su entorno. Pero una vez que el expresident fugado filtró este miércoles, a través de ElNacional.cat, el último modelo en el que pretende basar su postura de partida, fue más sencillo dar con la persona que trata estos asuntos en nombre del líder socialista.
"Una cosa es el pliego de condiciones con el que uno se sienta a negociar, y otra muy importante es que para negociar hay que ceder", advierte, por su parte, uno de los dirigentes del PSC más cercanos a Sánchez. "¿Ellos qué van a ceder? Porque no hay nada con la autodeterminación, y si negociando el precio es muy alto, es decir, se mantienen en máximos, el precio no se paga y punto".
Es decir, ¿nuevas elecciones el 14 de enero? "Claro, ¿por qué no? Las negociaciones se hacen para llegar a acuerdos", concluye. "Y los acuerdos sólo se alcanzan cuando son buenos para ambas partes".