El PSOE ha confirmado este martes que propondrá a la expresidenta del Govern balear Francina Armengol como candidata la Presidencia del Congreso de los Diputados, en la sesión constitutiva de las Cortes que se celebra este jueves a las 10 de la mañana.
La Comisión Ejecutiva Federal del PSOE confirmará el miércoles esta propuesta al Grupo Parlamentario Socialista. El presidente en funciones Pedro Sánchez ha convocado para mañana miércoles una reunión de la Ejecutiva del PSOE a las 9,30 horas en Ferraz, y luego se reunirá con todos los diputados y senadores del partido, a partir de las 12.30 horas en el Congreso.
Francina Armengol milita desde los años 90 en el Partido Socialista de Illes Balears (PSIB) y ha sido presidenta del Govern balear durante los últimos ocho años, mediante un pacto con Podemos y los independentistas de Més.
Inició su trayectoria política como concejal en el Ayuntamiento de Inca y luego se convirtió en diputada del Parlament balear. También presidió el Consell insular de Mallorca entre 2007 y 2011, tras la etapa protagonizada por Maria Antònia Munar (UM). En 2015 se convirtió en la primera mujer que preside el Govern balear, cargo que revalidó en 2019.
Sánchez rescató a Armengol como cabeza de lista al Congreso de los Diputados por Baleares en las elecciones autonómicas del 23-J, después de que fuera derrotada en los comicios autonómicos de mayo por Marga Prohens, quien ahora preside un Govern monocolor del PP, mediante un pacto programático con Vox.
Fuentes oficiales de Ferraz han destacado que Francina Armengol "representa la lucha por la igualdad de las mujeres, la justicia social y la apuesta por la convivencia basada en el diálogo. Armengol es también ejemplo de un país que convive con naturalidad en la riqueza que suponen las diversas lenguas que se hablan en España, además de una dirigente comprometida con la transición ecológica".
El PSOE ha lanzado la candidatura de Francina Armengol tras consensuar este nombre con sus socios del bloque de investidura. No obstante, la elección se producirá el jueves en votación secreta, cuyo resultado aún resulta incierto, pues los socialistas intentan todavía recabar el apoyo de Junts, el partido del fugado Carles Puigdemont, para contar con la mayoría necesaria en la Cámara.