Unidas Podemos sigue tratando de encontrar su camino tras la marcha de Pablo Iglesias. Con Ione Belarra como nueva líder, la formación morada ha exacerbado sus diferencias con el "bipartidismo" para apostar por un perfil antisistema que recuerda al de sus primeros años de vida.
Esto explica que, con motivo del décimo aniversario de la reforma del artículo 135 de la Constitución (que estableció el concepto de "estabilidad presupuestaria" para priorizar el pago de la deuda pública sobre cualquier otro gasto del Estado) la extrema izquierda haya cargado contra PSOE y PP para reivindicarse como el encargado de "proteger a la gente" y "sostener a empresas y trabajadores".
Así se ha expresado este jueves Belarra en un largo hilo de Twitter. La ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030 ha criticado que los socialistas participaran de "una reforma pactada a espaldas de la ciudadanía en pleno agosto para poner los intereses de los especuladores por delante de los servicios públicos".
Y es que la reforma constitucional producida durante el gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero supuso, en términos de Belarra, la "constitucionalización del neoliberalismo en España", expresó "la esencia del bipartidismo" y "blindó la austeridad".
Una respuesta a la crisis económica iniciada en 2008 que nada tiene que ver, en el imaginario podemita, con la respuesta del actual Gobierno de coalición. Y es que gracias a ellos "la pandemia ha enterrado el paradigma de la austeridad".
"La gestión de esta crisis también ha sido diametralmente opuesta. Mientras hace una década se recortó lo público y se destruyeron derechos sociales; esta vez, con UP en el Gobierno, se han dedicado los recursos a proteger a la gente y a sostener a empresas y trabajadores/as", ha zanjado Belarra en la red social del pájaro azul.
Recientes discrepancias
Esta es tan solo una de las últimas -y públicas- desavenencias de Unidas Podemos con su socio de Gobierno. Ya sea con motivo de la repatriación de los menores marroquíes que se encuentran en Ceuta o con la posible solución al precio histórico de la luz, podemitas y socialistas no se ponen últimamente de acuerdo.
Muy sonadas están siendo sus discrepancias de estos días con respecto a la presencia de más de mil menores extranjeros no acompañados (menas) desde la invasión auspiciada por Marruecos en primavera.
Desde Unidas Podemos han expresado su "rechazo al proceso de devolución" de estos menroes, pero el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ya ha prometido al máximo dirigente ceutí, Juan Jesús Vivas, que éstos volverán al país vecino en cuanto sea posible, descartando un reparto por la Península.
Mientras que con respecto a la factura de la luz, la extrema izquierda populista pide intervenir el mercado eléctrico, pero los socialistas creen que esta receta "adolece de un análisis sobre su compatibilidad con la normativa comunitaria".
La guerra en el seno del Gobierno de coalición está más viva que nunca. Y todo porque desde Unidas Podemos están tratando de marcar distancias con el PSOE y volver a esa inercia antisistema que tantos réditos les dio durante la crisis económica de hace una década. Una receta con la que aspiran a repetir éxitos en esta crisis derivada por la pandemia, aunque las encuestas auguren su retroceso.