La ministra de Defensa, Margarita Robles, ha desvelado el modus operandi para con los colaboradores que se acercan al aeropuerto de Kabul sin la documentación requerida. A éstos se les pide que griten "¡España, España!", que porten una bandera nacional o algo rojo para poder identificarles.
Lo ha explicado durante su visita a la base aérea de Torrejón de Ardoz este domingo, donde ha asegurado que el Gobierno de España hará todo lo posible para "no dejar a nadie atrás" y evacuar a cuantas personas sea posible de Kabul: "El mejor homenaje a los caídos en Afganistán es traer a todos los que podamos".
Así se ha expresado Robles tras la visita en la que ha agradecido a los militares su trabajo en la evacuación de personal de Afganistán. "Quisiera poner en valor el sacrificio, la abnegación y la eficacia de las Fuerzas Armadas", ha dicho con una voz quebrada por la emoción.
"Vamos a traer a toda la gente que podamos", ha reiterado una y otra vez, aunque insistiendo en que, en última instancia, el éxito en estas labores "depende de los americanos": "No depende de nosotros, depende los americanos, pero vamos a hacer todo lo posible".
Y es que las dificultades para las evacuaciones se han exacerbado por la presencia cada vez más asfixiante de talibanes en la capital: check points, entradas colapsadas, avalanchas, disparos en el aeropuerto... Una situación tan dramática que la propia Margarita Robles ha admitido que hay familias que "se han tirado 24 horas, esperando con niños, y no han podido entrar".
En los últimos días, han llegado a Torrejón cerca de 400 afganos en tres aviones fletados por el Ejército español y otros tres por el Servicio Europeo de Acción Exterior. A ellos se unirán en las próximas horas, 177 personas más, entre colaboradores nacionales y de otros países de la UE y personal miltar de EEUU, que ya vuelvan a Madrid desde Dubái.
Esta labor, en la que están implicadas de forma simultánea varios ministerios, desde Defensa a Exteriores, pasando por Inclusión, está suponiendo un avance sin paliativos del papel internacional de España y, por ende, del Ejecutivo que preside Pedro Sánchez, que en las últimas horas ha recibido en primera persona el aplauso de la UE y de EEUU.