Carles Puigdemont ha sido timado por una empresa catalana por la gestión de la autorización electrónica que necesitan los ciudadanos europeos que quieran viajar a Canadá, caso del expresident fugado, que pagó 93 euros a esta empresa, Electronic Travel Service, por un trámite que cuesta apenas 7 en una web del Gobierno de Ottawa.
Canadá rechazó el ingreso el ingreso al país de Puigdemont porque jamás respondió a la solicitud de las autoridades de datos adicionales para completar el proceso: Electronic Travel Service no le hizo llegar las dos cartas en las que se pedían éstos, recoge el periódico local La Presse.
"En todo momento, mi cliente estaba convencido de que estaba tratando directamente con el Gobierno de Canadá pero se determina en última instancia que este no era el caso", ha explicado Stéphane Handfield, abogado del líder independentista, huido de la justicia española.
Puigdemont pretendía realizar su primer viaje transatlántico para trasladar a la opinión pública norteamericana su habitual discurso contra España y sus instituciones. Al menos por el momento, esto no será posible.