La Junta Electoral de Zona de Valencia ha desestimado las denuncias presentadas por PP y Vox contra la vicealcaldesa de Valencia y candidata socialista a la reelección, Sandra Gómez, por el envío masivo de cartas a los vecinos sobre actuaciones llevadas a cabo en distintos puntos de la ciudad, al considerar que fueron hechos anteriores a la convocatoria de las elecciones del 28-M.
En las dos resoluciones, fechadas este martes y a las que ha tenido acceso EL ESPAÑOL, la Junta Electoral acuerda no entrar al fondo de las denuncias. En este sentido, ve acreditado que "todos los envíos postales fueron hechos con anterioridad a la convocatoria de elecciones", así como que el contenido de las cartas "forma parte del desarrollo normal de la administración". Las resoluciones no son firmes y contra ambas cabe recurso de alzada ante la Junta Electoral Provincial.
Así lo ha dado a conocer este miércoles la propia Gómez antes de registrar la candidatura del PSOE de Valencia en la Junta Electoral. La vicealcaldesa ha mostrado su repulsa por esta "campaña de acoso, derribo, intoxicación y mentiras".
"Llevan ocho años intentando generar la misma imagen del resto de partidos, pero para su desgracia somos distintos. No tenemos nada que ver con esos gobiernos corruptos", ha asegurado en declaraciones recogidas por Europa Press.
Para la vicealcaldesa, son resoluciones "bastante claras" y demuestran que "todos los hechos que denunciaba la derecha y la ultraderecha se hicieron correctamente". Por eso ha defendido que la información contenida en las cartas forma parte del día a día del Ayuntamiento e "incluso es adecuada para dar transparencia a la gestión".
Las cartas
El envío masivo de cartas autobombo del PSOE con dinero público del Ayuntamiento de Valencia se ha convertido en la primera gran polémica de la recta final de la precampaña electoral a las próximas elecciones municipales.
La vicealcaldesa, concejala de Urbanismo y candidata socialista al Ayuntamiento, Sandra Gómez, ha gastado más de 24.000 euros en enviar a 74.624 vecinos un documento firmado que enumera las iniciativas desplegadas por el PSOE en los últimos 4 años.
Compromís se desmarcó de la propaganda enviada por sus socios en la capital del Turia y el PP denunció el caso ante la Junta Electoral tras recabar toda la información de coste, fechas de envío y número de cartas.
Las misivas han llegado a gran parte de los hogares valencianos de forma personalizada y el envío ha tenido un coste de 0,27 euros por cada una.
Al presupuesto final hay que sumar una segunda factura de 4.605 euros por imprimir y ensobrar las cartas de Sandra Gómez, en total más de 24.000 euros del Ayuntamiento de Valencia.
El pasado 22 de marzo, Sandra Gómez solicitó mediante nota interior dirigida a la concejala de Servicios Centrales, Luisa Notario, de Compromís, "el traslado, lo más pronto posible, de las cartas depositadas" en un almacén municipal.
Las cartas estaban impresas y almacenadas en dependencias municipales desde el pasado mes de julio, pero el envío se ha ido retrasando durante meses por falta de presupuesto, según indicaron fuentes municipales.
El noviembre, se volvió a recordar a Servicios Centrales y finalmente el envío se aprobó el 28 de febrero. La nota interior del Ayuntamiento comunicaba "el envío de 74.624 cartas desglosadas en doce lotes diferentes".
La remesa y se ha realizado a través de la contrata postal del Ayuntamiento de Valencia, cuyo servicio presta Correos.
Durante estos últimos días, muchos vecinos han seguido recibiendo en su buzón la carta de Gómez pese a las limitaciones propias del periodo electoral, pero como se enviaron antes de que arrancara este periodo la Junta Electoral no entra a valorar el fondo del asunto ni si llegaron a las casas días después.
Disculpas
Tras conocerse el archivo, Sandra Gómez ha exigido una disculpa pública y personal a la líder del PP y candidata a la Alcaldía, María José Catalá, y ha advertido que tanto su partido como Vox "deberían estar muy preocupados" porque la Fiscalía Provincial de Valencia ha abierto una investigación tras una denuncia del PSOE en relación con una campaña de octavillas presuntamente injuriosas hacia el presidente Ximo Puig y su familia.
Una campaña, ha denunciado, "de intoxicación y barro que no va firmada", por lo que "los partidos de la oposición tendrán que explicar quién la ha pagado". "En estas semanas a quien se le va a borrar la sonrisa es a los dirigentes del PP y Vox", ha añadido.