Vox no ceja en su empeño en que el Gobierno andaluz derogue la actual Ley de Memoria Histórica y Democrática de Andalucía aprobada en 2017 cuando gobernaba Susana Díaz en la comunidad. Este miércoles se lo ha vuelto a pedir al presidente, Juanma Moreno, en la sesión de control.
El mismo día que los restos del general franquista Gonzalo Queipo de Llano fueron exhumados de la basílica de La Macarena, Vox registró por la mañana en la Cámara andaluza una proposición de Ley de Reconciliación que contempla la derogación de la actual normativa andaluza.
Sin embargo, Moreno ha dado la misma respuesta que ya le dio el pasado mes de diciembre cuando la formación verde volvió a llevar esta petición al Parlamento: para cambiarla tiene que existir "un amplio consenso" entre todos los grupos.
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"Estamos dispuestos a mejorarla pero si es con amplio consenso. No voy a cambiar una ley con un determinado sesgo por otra con un sesgo determinado donde la amplia mayoría se queda fuera", ha remarcado Moreno.
Para ello Vox le ofrece sus 14 diputados porque contarían con 72 votos. Es decir, cinco síes más que cuando se aprobó la normativa actual en 2017 de la mano del PSOE, Podemos e IU con la abstención del PP y Ciudadanos.
Retratar al PP
Vox ha vuelto a llevar su proyecto de ley al Parlamento para retratar a Moreno. Cree que la normativa andaluza es el "origen y la madre" de la aprobada recientemente por "los socialistas y comunistas" en el Congreso de los Diputados, que el líder nacional de su partido, Alberto Núñez Feijóo, ha prometido derogar si llega a Moncloa.
El dirigente popular ha adquirido este compromiso en la sesión plenaria donde ha tenido que escuchar las críticas de los partidos de izquierdas por "su feo silencio" en torno la exhumación de Queipo de Llano.
Tanto el presidente del grupo socialista, Juan Espadas, como la portavoz de Por Andalucía, Inma Nieto, le reprocharon que no haya tenido "ni un palabra" sobre este hecho y para las víctimas del franquismo.
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Moreno ha destacado que la Junta ha hecho lo que tenía que hacer que es "cumplir" la ley de Memoria Democrática, mientras Espadas le afeó que "se negara" a opinar sobre esta decisión y le recordó que es algo que ha pasado en Andalucía "no en la luna".
Al respecto, Moreno también aseguró que su gobierno "estará pendiente para reconocer a esas personas que sufrieron el final de la dictadura franquista en sus propias carnes".
"El postureo y las fotos"
En esta sesión de control también se han abordado otros asuntos. Juan Espadas situó, su intervención en los servicios esenciales -sanidad, educación servicios sociales- para reprochar a Moreno que su gestión los "ha empeorado".
Espadas instó a Moreno a modificar los presupuestos andaluces de 2023 en estos capítulos, a dialogar y pactar las cuentas para evitar que su grupo presente una enmienda la totalidad. También sostuvo que las inversiones de la Junta crecen por las aportaciones de los fondos estatales y de la UE.
"Su problema, señor Moreno, es no gestionar los problemas de Andalucía y sólo le gusta el postureo, las fotos e inaugurar centros sanitarios que o no funcionan o lo hacen sin en malas condiciones", le ha reprochado Espadas. También que inaugurara antes de las elecciones 17 quirófanos del nuevo Hospital Militar que "no funcionan".
El Jefe del Ejecutivo andaluz replicó defendiendo el esfuerzo económico de la Junta desde 2018 en estas políticas, "muy superior" al de los gobiernos socialistas, y aseveró que si Andalucía tiene problemas estructurales es por la herencia que ha dejado el PSOE-A durante 37 años en la Junta. Por ello, le invitó a que trajera a esta Cámara propuestas para poder tenerlas en cuenta.
Sobre la alcaldesa de Marbella
Durante los demás turno de preguntas, pese a los tibios intentos del PSOE-A y Por Andalucía, Moreno no dio explicaciones sobre la presunta trama de corrupción que podría afectar a la alcaldesa de Marbella y senadora del PP, Ángeles Muñoz, en el que el PSOE se personará.
Los socialistas intentaron incluir en el pleno una pregunta sobre este asunto pero fue rechazada por la Mesa del Parlamento con la mayoría del PP. Desde el partido aseguran que ella "ni está imputada ni tiene relación con la trama que investigan".
Por último, antes de entrar en el salón de plenos, Moreno fue preguntado sobre si compartía las declaraciones de la presidenta de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, acusando a Pedro Sánchez de querer tener a la "oposición en la cárcel, como en Nicaragua".
Sin nombrarla ni censurarla directamente, aseguró que él es siempre partidario de "sumar y cooperar entre las distintas instituciones porque así se llega más lejos y mucho más rápido".