El Partido Andalucista (PA) estuvo vivo 50 años, una eternidad si se compara con la fugacidad de partidos actuales y, sobre todo, de sus líderes. Echó a andar en 1965 de la mano de Alejandro Rojas Marcos (Sevilla, 1940), el que fuera alcalde de la capital andaluza con las siglas del PA de 1991 a 1995.
Esta formación andalucista llegó a estar representada con cinco escaños en el Congreso de los Diputados en 1979 y a ostentar la Alcaldía también de Jerez de la Frontera y de Algeciras (Cádiz).
Retirado de la vida política, el fundador del Partido Andalucista recibe a EL ESPAÑOL en la casa donde se fundó la formación. Una gran cristalera a la izquierda deja ver el patio de paredes de amarillo albero y cuatro naranjos donde convocaban reuniones clandestinas para gestar la formación. A la derecha hay una placa en la que puede leerse Breakfast.
Como si de un epitafio se tratara, una fuente preside uno de los patios de lo que hoy es un hotel. Puede leerse: En esta casa nació el hoy Partido Andalucista en la primavera MCMLXV. Más abajo, una inscripción anuncia el inicio y el fin de la formación.
El PA perdió su representación en el Parlamento andaluz en 2008, un año después de oponerse de manera frontal a la reforma del Estatuto de Autonomía. Ahí comenzó su declive tras una etapa en la que formó parte del Gobierno de la Junta con el PSOE durante dos legislaturas.
Los andalucistas no obtuvieron representación en la Cámara regional ni en las elecciones de 2012 ni en las celebradas en marzo de 2015, año en el que desapareció en aquel XVII Congreso Nacional Extraordinario, celebrado en Torremolinos.
Unos años antes, la que fuera una de sus últimas secretarias generales, Pilar González, fundó la plataforma Primavera Andaluza para seguir este cometido, pero finalmente fue engullida políticamente por Adelante Andalucía, el partido de Teresa Rodríguez, el único que tiene una vocación plenamente andaluza.
Rojas Marcos rememora con cierta nostalgia aquellos años, pero también con malestar cuando ve que partidos de derechas y de izquierdas "utilizan mal el término andalucismo".
"De la terminología se usa y se abusa", asegura porque significa una cosa muy clara. Utilizado por primera vez en la historia por Blas Infante se refiere al "reconocimiento de la identidad de Andalucía y la convocatoria a un poder andaluz".
"Que el PP diga que es andalucista es como si quiere decir que es catalanista". Para Rojas Marcos el partido que lidera Juanma Moreno en Andalucía y que también gobierna la Junta, junto a Ciudadanos, es "un partido español y, en consecuencia, españolista y a mucha honra para ellos". Pero, "que no lo quieran ser todo, no pasa nada".
El expolítico, que con tanto orgullo llevó las siglas por todo el territorio andaluz, imagina que Andalucía para el PP es tan importante como Valencia, Galicia o Cataluña. "Es su obligación, pero no pueden decir que su patria es Andalucía, su patria es España".
Rojas Marcos cree que en ese uso indebido de esa palabra hay un intento de confusión, de aprovechamiento o de entender que les beneficia de alguna manera. Lo resume como "una engañifa". En cualquier caso, considera que los populares "no son los únicos que dicen que son andalucistas, el PSOE afirma lo mismo y las izquierdas también".
La patria andaluza
Tirando de recuerdos, asegura que el PA del que puede hablar es un partido para el que su patria era Andalucía. "La patria la escojo yo, tengo la nacionalidad española porque la ley me obliga a que la tenga. Si pudiera tener la nacionalidad andaluza la tendría".
"No me imagino yo a uno del Partido Popular ni del Partido Socialista diciendo que su patria es Andalucía". Cree que hay políticos que utilizan el término para "congraciarse con los ciudadanos andaluces y hacerles ver que ellos son más andaluces que nadie". Algo que le parece a todas luces un error.
¿Un nuevo andalucismo?
"He oído al Partido Comunista decir eso, al PSOE, al PP. He oído a todo el mundo decir que es andalucista y ahí hay una engañifa", asegura. Entonces, ¿quién se ha quedado la bandera del Partido Andalucista hoy si es que la tiene alguien? "Si quieres decir con la proclama del Partido Andalucista, nadie", responde.
Cree que hoy por hoy lo que significó el Partido Andalucista no está. "Ojalá se le espere, yo lo espero y lo estoy deseando para que las decisiones las tome aquí y no en Madrid".
Sí tiene entendido que hay algunos grupos que están pretendiendo crear esa fuerza. Grupos más o menos potentes. "Yo encantado, cuantos más haya mejor y ojalá..." ¿Se refiere a Teresa Rodríguez? "Yo no me quiero referir a nadie en particular. No sigo mucho la política de cerca, pero sí sé que hay algunos grupos que no dependen de Madrid".
Precisamente, la causa por la que Rodríguez se desligó de Podemos fue porque quería virar la coalición de Adelante Andalucía hacia el sur y crear una fuerza con voz propia andaluza, insistió la política gaditana tras su refundación. Primavera Andaluza sigue formando parte.
Para resumir, insiste en que "el Partido Andalucista es una pieza única en la historia de Andalucía, de España y de Europa, que duró 50 años". "Tuvo grandes éxitos, pero por cada éxito tenía 9 no éxitos. De cada diez intentos, triunfaba uno".
Adiós al andalucismo
Rojas Marcos recuerda con nostalgia ese día en el que el pueblo andaluz les quitó la confianza y, por dignidad, ellos decidieron retirarse de la vida política. Siempre tuvo el temor de que al ver que el partido ya tenía poco apoyo, la dirección decidiera o tratara de convencer a los militantes de que lo mejor era unirse a otro partido, fusionarse con otro.
Es decir, "desvirtuar el andalucismo". Como le horrorizaba esa idea, se pasó seis meses recorriendo Andalucía para convencer a los militantes de que lo más apropiado era disolver.
A su juicio, la formación "estuvo ahí, con sus aciertos y sus errores", pero lamenta que, cuando desapareció, a nadie se le ocurrió que apareciera un nuevo partido andalucista desde el pueblo. "El pueblo andaluz, hoy por hoy, hasta ahora no ha considerado conveniente que haya un partido andalucista potente, soberano y exclusivamente andaluz". Las encuestas no le auguran un buen resultado a los de Teresa Rodríguez.
De izquierda
Lo que sí tiene claro que hoy por hoy "el andalucismo es de izquierda" y lo vuelve a ligar con la figura de Blas Infante. Cree que hoy podría surgir un partido andalucista de derechas, pero no le augura largo recorrido.
A su juicio, un ejemplo fue Manuel Clavero, un hombre de centro-derecha, que fundó dos partidos andaluces en ese espacio político: el Partido Social Liberal andaluz al principio de la democracia y Unidad Andaluza más adelante.
Al final acabó disolviéndolos porque la burguesía no le apoyaba, como él mismo decía. "La clase que lógicamente apoyaría a un partido andaluz de derecha estaba por el españolismo", señala.
Y Rojas Marcos cierra con una cuestión importante. "Cataluña y el País Vasco desde su origen tienen una bandera independentista" y ni el andalucismo, ni el movimiento de Blas Infante, ni el Partido Andalucista las han tenido nunca.