'El Venezolano', espía de Maduro, socio de Aldama y amigo de sultanes: mafia, amenazas, lujo y blanqueo

A este lado del charco, tal y como ha revelado EL ESPAÑOL, Brizuela era el dueño de la clínica que presuntamente había empleado la trama de Koldo García Izaguirre, mano derecha del ministro José Luis Ábalos, para blanquear el dinero de las mordidas de los contratos durante la pandemia.

Así lo han venido reflejando diversos diarios latinoamericanos. Desvelados sus secretos, ahora ya se sabe que Brizuela estaba inmerso en una investigación internacional que involucraba a mafias, cárteles de la droga, cargos políticos y servicios de inteligencia.

Brizuela Guevara se asoció a través de Pronalab, una de sus clínicas, con Víctor de Aldama, uno de los líderes de la trama de las mascarillas. En un informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, una de las empleadas de la clínica habla con varios de los detenidos sobre cómo traer a España fardos de euros y dólares desde República Dominicana que repartía con los miembros de la trama y socios del presidente del Zamora.

Es tras la compañía Pronalab donde aparece El Venezolano, un personaje cuya identidad real se reveló el pasado 2023 en una investigación que le dejó al descubierto como espía y agente infiltrado al servicio del gobierno de Nicolás Maduro. 

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Según la documentación filtrada por el grupo de hackers Guacamaya Leaks, Brizuela Guevara era el enlace de la mafia rumana, del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional de Venezuela y también se le relaciona con actividades de terrorismo y narcotráfico, así como de lavado de dinero. Todas esas actividades están conectadas a Puerto Rico, Cancún y otras áreas del Caribe, de acuerdo a informacion que ya es pública gracias a la salida a la luz de documentos.

El Venezolano, junto a Aldama y Carlos Peralta, presidente de la Organización Mundial por la Paz, en la casa del sultán de Darfur. E.E.

La historia de Brizuela Guevara se entremezcla con operaciones en México, involucrando a mafias rusas y rumanas, así como a gobiernos y cárteles de la droga en México. Según publicaron diarios latinoamericanos, la línea de investigación que se seguía sobre él tiene que ver con un entramado de lavado de dinero y drogas que conectaba Puerto Rico con Cancún, Punta Cana (República Dominicana) y Los Roques (Venezuela).

Biografía y escándalos

Brizuela nació el 9 de julio de 1974 en Caracas, Venezuela. En 2011 obtuvo el pasaporte mexicano, y por esas mismas fechas llegó a la región de Quintana Roo, una de las más exclusiva y adineradas regiones de todo México y donde operaría con total libertad con el beneplácito de la clase política.

Allí se establecería junto a su pareja, en Cancún y Playa del Carmen, ampliando un negocio de bienes raíces con los que ya operaba en Florida y Ciudad de México, tal y como revelaron el pasdo año medios locales mexicanos.

El Venezolano, según numerosas publicaciones de la prensa latinoamericana, fue el brazo ejecutor del exgobernador de Quintana Roo en México. Sobre él se ha llevado a cabo estos años una intensa investigación encabezada por el gobierno de Estados Unidos, a través de la CIA y el FBI así como la DEA (la agencia antidroga de los Estados Unidos).

Tras la filtración de los Guacamaya Leaks se evidenció que El Venezolano había realizado "sospechosas operaciones financieras a través de Belice hacia Puerto Rico, que las autoridades estadounidenses consideran parte de una red de lavado de dinero de organizaciones criminales y terroristas".

La red criminal involucraba a varios países, y las agencias de inteligencia estadounidenses la denominaron como El Cártel del Caribe. Brizuela Guevara era considerado un eslabón dentro de esta estructura, así como entre grupos del crimen organizado y personajes de la política mexicana.

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En un reportaje dado a conocer por el portal de noticias Eje Central sobre esta investigación, se indicaba que entre los materiales de los Guacamaya Leaks aparecía un oficio fechado el 31 de enero de 2022, con el número BE-256, informando sobre The Belize Bank Limited.

El documento estaba firmado por un coronel desde Belice. En él se acusaba a Jorge Luis Brizuela Guevara de haber "conformado una estructura" a través de varios bancos desde Belice hacia Puerto Rico.

De Aldama junto a su esposa, Patricia Ramos, el presidente y fundador de la Organización Mundial por la Paz, Carlos Peralta, y el asesor del gobernador de Quintana Roo, en una recepción celebrada en Turquía en la casa del sultán de Darfur. A la derecha de todo, El Venezolano. Zamora FC

"Estas operaciones sirven para movilizar recursos de procedencia ilícita de las estructuras financieras de organizaciones criminales mexicanas", señalaba aquel documento, que también mencionaba a grupos criminales hondureños, colombianos e incluso a la mafia rumana. Todas ellas organizaciones asentadas en países como Belice y Guatemala.

Las fechas en las que tuvieron lugar estos hechos según esa información fue en la recta final del gobierno en Quintana Roo de Carlos Joaquín González, hoy embajador de México en Canadá, de quien es amigo, operador y beneficiario El Venezolano, situación que también tienen bajo investigación las agencias de inteligencia de Estados Unidos.

En aquel tiempo Brizuela Guevara finalizaba los contratos que se le habían adjudicado durante la pandemia para montar carpas Covid-19 en Cancún y Chetumal que obtuvo de manera directa del gobernador de Quintana Roo, Carlos Joaquín González, por más de 544 millones de pesos (unos 30 millones de euros).

Al mismo tiempo que recibía adjudicaciones de su amigo, montaba un nuevo negocio de laboratorios para aplicar pruebas rápidas y PCR a los turistas y trabajadores hoteleros de Quintana Roo en los primeros meses de reapertura de la actividad económica. Ese laboratorio se llamaría Pronalab, y es desde donde, presumiblemente, se colaboraría con la trama Koldo para lavar parte del dinero de las adjudicaciones millonarias.

Tras la adjudicación de los contratos de las carpas Covid-19, fue acusado de estafar a varios empresarios, y fue víctima de un intento de asesinato. Brizuela Guevara fue tiroteado dentro de su coche en lo que fue calificado por las autoridades policiales como un "ajuste de cuentas".

El Venezolano también fue investigado en 2022 por el asesinato de otro empresario argentino en Riviera Maya, Federico Mazzoni, que fue ejecutado por sicarios profesionales. 

Relaciones

En sus redes sociales, El Venezolano ha presumido en innumerables ocasiones de su relación de alto nivel, de lujo y de encuentros con altos funcionarios del Gobierno de México, pero también con altos cargos federales y municipales, y con famosos en distintos lugares del mundo.

Tanto la CIA como el FBI le tenían en su punto de mira por facilitar la llegada de venezolanos vinculados a Maduro para vacaciones, estancias cortas o largas a Cancún, lo mismo que por su responsabilidad en el blanqueo de dinero. En este contexto, la investigación referida indica que entre los documentos de los Guacamaya Leaks, aparece un oficio confidencial del 4 de agosto de 2020. Este va dirigido al General de División Luis Crescencio Sandoval.

Brizuela es un hombre de contactos, y por eso en sus redes sociales aparecen imágenes con toda clase de altas personalidades. Lo mismo tiene fotos con el embajador de México en España, Quirino Ordaz (exgobernador de Sinaloa señalado por presuntos vínculos con grupos delictivos), como con el gobernador de Oaxaca, Alejandro Murat. En otras fotos se le ve en el cumpleaños de Luis Felipe Calderón, o posando en el despacho de Ahmed Ali Dinar, el sultán de Darfur, en Sudán.

Durante sus años de esplendor realizó viajes por todo el mundo, fiestas y reuniones con personalidades de los sectores político empresarial y hasta del espectáculo, con quienes extendió sus redes de poder. Todo ello mientras ejercía como cercano brazo ejecutor del gobernador y perpetraba a la vez toda clase de ilícitos, de acuerdo a las investigaciones de la CIA y el FBI reveladas en la filtración de lo Guacamaya Leaks.

Entre sus reuniones, destaca, por su relevancia dadas las revelaciones de las últimas semanas, las que pudo llevar a cabo en Fitur 2020. Solo unas semanas antes de que estallara la pandemia, se estrechaba la mano con el por aquel entonces ministro de Transportes José Luis Ábalos.

El espía venezolano se refirió a él como un "amigo". El Venezolano acompañó en dicha visita al gobernador de Oaxaca, Alejandro Murat, el cual, tal y como publicó EL ESPAÑOL, se reunió con Ábalos, Koldo y De Aldama en febrero de 2019.