Al desertor ruso lo mató "un grupo profesional": vigiló su rutina en Alicante y las cámaras del garaje

Según detallan a EL ESPAÑOL fuentes próximas a la investigación, se ha podido comprobar que quien llevó a cabo el encargo de asesinar al capitán Maxim Kuzminov había estudiado, previamente y con minuciosidad, la escena del crimen y a su futura víctima.

Los investigadores han podido acreditar que los asesinos localizaron el lugar en el que se había ocultado el prófugo. También que realizaron seguimientos de su rutina diaria en esa localidad en la que permanecía oculto tras desertar de las tropas rusas en la guerra de Ucrania.

A su vez, las primeras investigaciones han permitido constatar que incluso habían controlado las cámaras del lugar donde iban a acabar con su vida, el garaje de una urbanización alicantina. Tras el inicio de las pesquisas, los investigadores de la Guardia Civil en calidad de Policía Judicial hablan de un alto nivel de profesionalización en la materia. Una tarea, apuntan las fuentes, que no cualquiera sería capaz de consumar.

Maxim Kuzminov, la víctima, es un capitán ruso de 28 años que en agosto del año pasado desertó y se entregó a las fuerzas ucranianas con un helicóptero. Kuzminov llevó voluntariamente un Mi-8 de Rusia a la región de Járkov, en manos de la inteligencia ucraniana.

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La deserción se dio a conocer en septiembre, cuando el GRU publicó unas imágenes del piloto en el que explicaba cómo fue contactado por la inteligencia enemiga, que le ofreció pasarse al bando ucraniano a cambio de dinero y protección. Era la llamada operación Synytsia. Desde entonces, distintas publicaciones y medios afines a Putin han remarcado la sed de venganza sobre este y otros desertores de las fuerzas de Moscú. Esto propicia que la sombra de Moscú esté sobre la mesa como una importante posibilidad a la hora de encargar el crimen.

Identidad falsa

Este lunes trascendía la noticia de que habría sido encontrado muerto en la localidad alicantina de Villajoyosa. Así lo ha confirmado el portal ucraniano Kyiv Post y varios medios de comunicación rusos.

La muerte del piloto ha sido anunciada por el representante de la inteligencia militar ucraniana (GUR), Andrí Yusov, quien indicó que se puede "confirmar el hecho de la muerte", aunque no mencionó el lugar en el que fue encontrado muerto, según recogía Efe.

Tal y como ha podido confirmar EL ESPAÑOL de fuentes de la Guardia Civil en Alicante, el capitán llevaba encima una identidad falsa en el momento en el que fue asesinado. Era la que empleaba desde que huyó de Rusia tras su destierro, ante las posibles represalias de los servicios de inteligencia próximos al Kremlin.

Los hechos tuvieron lugar el pasado martes 13 de febrero en un complejo residencial cercano a La Cala, en la localidad de Villajoyosa, Alicante. La noticia hacía referencia a la muerte de un ucraniano que apareció tiroteado en la rampa de salida del garaje de una urbanización. Se comenzó a investigar el hecho como un posible ajuste de cuentas.

En una primera fase se había identificado a la víctima como un varón de 33 años de nacionalidad ucraniana. Pero en el transcurso de la investigación que se está llevando a cabo se ha tenido conocimiento de que la identidad que figuraba de esta persona era falsa. En realidad, la víctima era el capitán ruso que se ocultaba en esta localidad.

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Posible atropello

En un primer momento, se avisó a la Policía Local de la localidad sobre un atropello mortal en el garaje, ya que un testigo había visto un vehículo pasar por encima del cuerpo de la víctima.

Al llegar al lugar del suceso, la unidad del SAMU movilizada y los agentes comprobaron posteriormente que el fallecido presentaba alrededor de media docena de impactos de arma de fuego, por lo que solo se pudo confirmar su fallecimiento.

La Guardia Civil se ha hecho cargo del caso a través del Equipo Territorial de Policía Judicial de Villajoyosa. También se está investigando si un vehículo que apareció poco después incendiado en la vecina localidad de El Campello fue el utilizado por el agresor o agresores para matar a la víctima y emprender la huida.

El cadáver fue trasladado al Instituto de Medicina Legal de Alicante, donde lo sometieron a un examen forense para aclarar la causa exacta de la muerte. Y allí quedó constancia de que esta había sido por los impactos de bala recibidos.