Brais Cedeira Rafa Martí

Los agentes habían aguantado durante horas la noche del viernes ante las 1.000 personas que lograron derribar todas las vallas del cordón policial de la calle Ferraz. Ante un público tan minoritario, optaron por ir dejando que la protesta se muriese ella sola tin tener que cargar, pese a algún petardo o bengala que los ultras les lanzaron desde la primera fila. Poco a poco la gente ya se estaba marchando. Quedaban apenas unos 200 cuando apareció Javier Ortega Smith.

El hecho fue lo más destacado de una jornada pacífica, resuelta sin incidentes ni detenidos por los antidisturbios. Eran las 11 de la noche cuando el diputado nacional de Vox se presentó en el cruce de las calles Marqués de Urquijo y Ferraz para increpar a la Policía en la decimoquinta noche de protestas frente a la sede del PSOE en Ferraz.

Los manifestantes, hasta ese momento en primera fila, se dieron la vuelta y, entre vítores y aplausos que le iban dedicando, echaron a andar hacia él. En pie sobre la mediana de la calle, el representante de Vox se dirigió a los responsables del fuerte dispositivo policial para arremeter contra su "desproporción": "En Barcelona, cuando los CDR les breaban a piedras, había un policía por cada 100 manifestantes. Ahora hay 100 policías por cada manifestante".

No se produjeron altercados violentos. El volumen de manifestantes se redujo considerablemente en comparación con noches anteriores. Ortega Smith bramaba: "Verdaderamente, la próxima selección de la UIP va a tener que ser un poquito más exigente, porque si para desmovilizar a 25 chavales con banderas de España hace falta movilizar a toda la UIP de Madrid, de verdad que hay que hacer un esfuerzo en su selección”, prosiguió, mientras le vitoreaban: "¡Sí, señor!".

Con los presentes coreando "Ortega Smith, alcalde de Madrid", el político prosiguió con un discurso a viva voz hacia las cuatro líneas policiales que bloqueaban la intersección, donde hacia esa hora de la noche apenas permanecían dos centenares de manifestantes.

Ultras y policías se enfrentan cerca de Ferraz. Joan Gálvez

"Señor inspector y subinspectores, no necesitan los cascos, ni los chalecos, ni las defensas, ni los gases lacrimógenos, ni tanta parafernalia. Señor delegado del Gobierno, ¡es usted un sinvergüenza!", continuó el parlamentario.

Increpando

En el contexto de las recientes noches de protestas, donde varios manifestantes denunciaron detenciones arbitrarias y una actuación policial desproporcionada, el político señaló también al delegado del Gobierno en Madrid por no utilizar a los agentes de la Unidad de Intervención Policial para reprimir "las manifestaciones de la extrema izquierda, de los CDR en Cataluña y de los 'borrokas' en el País Vasco" y hacerlo por contra contra "chavales que gritan 'viva España' y 'fuera el traidor de Sánchez'". "Este despliegue nos parece desproporcionado y humillante", concluyó.

Pocos minutos después, invitó a los pocos presentes en la zona a marcharse pacíficamente porque "la Policía no ha conseguido ninguna detención", lo cual, en sus palabras, es sobre lo que "se ha dado instrucciones" a los agentes. "Sería cojonudo, de verdad, que estoy por irme y no puedan cargar porque es lo que están esperando. Os lo propongo como una cuestión divertida", dijo.

En ese momento, tras sonar el himno de España en un altavoz, la mayoría de manifestantes se dispuso a seguir al diputado de Vox, pero la línea policial en la zona de abajo de la calle Marqués de Urquijo impidió el paso de la comitiva, dejando solamente cruzar a Ortega-Smith y a sus escoltas.

Tras varios rifirrafes y encaramientos con la línea policial por esta actitud, los antidisturbios comenzaron a dispersar a los manifestantes calle arriba, de forma pacífica y sin intervenir. En ese momento, una decena de furgones policiales de refuerzo ponía rumbo de regreso a la comisaría.

Críticas

No era la primera vez que Ortega Smith aparecía en Ferraz para aborchornar e increpar a los agentes de la Policía Nacional. Sin ir más lejos, el jueves ya se acercó a la zona avisando a los policías que su intención era supervisar la actuación de la Unidad de Intervención Policial (UIP).

Allí les acusó por primera vez de cometer algún tipo de "abuso de autoridad" en las cargas policiales de estas dos semanas. Cuatro sindicatos de policías (SUP, JUPOL, UFP y CEP) respondieron automáticamente a sus "coacciones de Ortega Smith", expresando su preocupación por los hechos y por las reacciones desmesuradas del diputado.

Este viernes, tras una nueva afrenta gritando, persiguiendo y señalando a los agentes a pie de terreno, el SUP y JUPOL han salido de nuevo al paso de las críticas al ver las imágenes de Ortega Smith en Ferraz. "Ejemplo nefasto. Cuando la Policía Nacional encargada de la seguridad en una manifestación da una orden hay que cumplirla".

JUPOL ha puntualizado algo más. "Intolerable actitud del Sr. Ortega Smith con la fuerza actuante en Ferraz. Ha tenido expresiones muy desafortunadas hacía la UIP, que son los mismos que sostuvieron el el Estado de Derecho el 1 octubre de 2017, o les protegieron en Vallecas en un mitin".