Sólo 24 horas después de su primer encuentro con Joe Biden, el presidente de la República Popular China, Xi Jinping, mantendrá otra bilateral con el presidente español, Pedro Sánchez. La cita se celebrará en los márgenes de la Cumbre del G20 que se celebra en Bali (Indonesia).
La reunión ha sido concertada de mutuo acuerdo para mañana martes a las 11:00 horas (hora peninsular española), según ha informado la Secretaría de Estado de Comunicación (SEC). Fuentes cercanas al presidente apuntan a este diario que "éste es el momento y el lugar" para tener esta bilateral.
La cumbre del G20 "es una cita eminentemente económica, pero la guerra en Ucrania y sus consecuencias obligan a tratar asuntos geoestratégicos", señalan fuentes desde Moncloa. Sánchez prevé tratar asuntos que son clave para España, como la emergencia alimentaria global, o la crisis energética. "Esos asuntos, así como la lucha contra el cambio climático, sólo se pueden abordar desde una perspectiva multilateral, y China es una gran potencia sin la que no se pueden trabajar".
Éste es el segundo encuentro entre ambos mandatarios, después de que Sánchez lo recibiera en Moncloa hace ahora exactamente cuatro años. En noviembre de 2018, Xi realizó una visita de Estado a España. Aunque fue impulsada por el anterior Gobierno de Mariano Rajoy, Sánchez pudo darle máxima trascendencia al decidir ambos Gobiernos que las relaciones entre España y China se elevaran al nivel de "estratégicas" para ambos países.
Fuentes oficiales del Gobierno señalan que, durante el encuentro, Pedro Sánchez pedirá al líder chino que medie ante el presidente de Rusia, Vladímir Putin, con el fin de alcanzar un acuerdo de paz en Ucrania. "Para los Estados miembros de la UE, China es un socio comercial indispensable, y a la vez un rival estratégico", aclaran desde Moncloa, "pero para nosotros es importante resaltar el papel que puede y debe jugar Pekín en el escenario actual", sobre todo en la crisis alimentaria.
Aunque Putin lo cuenta entre sus aliados políticos, ya durante los últimos meses Xi Jinping se ha desmarcado de la ofensiva rusa en Ucrania, debido al elevado coste que puede tener para la economía mundial y por el riesgo de que desencadene una crisis alimentaria a gran escala. Moscú no ha desmentido que, entre bambalinas, esté avanzando en negociaciones con Washington en esta materia, información confirmada por este diario en fuentes diplomáticas.
Ya el pasado 21 de septiembre, el Ministerio de Exteriores chino, Wang Yi, reclamó "un alto el fuego" para encontrar "una solución" a la guerra en Ucrania, después de que Putin anunciara la movilización de 300.000 reservistas. Sólo dos meses antes, y también en Bali, Wang tuvo una bilateral con José Manuel Albares, titular de Exteriores español, que acompañará a Sánchez en la reunión con Xi este martes.
"Llamamos a todas las partes importantes a que hagan un alto el fuego a través del diálogo y encuentren una solución que responda a las legítimas preocupaciones de seguridad de todas las partes, lo antes posible", señaló Wang Wenbin, portavoz del ministerio de Exteriores, en declaraciones recogidas por la agencia de noticias AFP.
Durante su reunión bilateral del martes, Pedro Sánchez y Xi Jinping abordarán "la situación geopolítica mundial y temas de interés estratégico", entre otros asuntos previstos en la agenda del encuentro, señalan fuentes del Gobierno.
El encuentro no sólo tiene una gran trascendencia económica para España, debido al creciente peso de las inversiones china en nuestro país. También servirá para que Pedro Sánchez estreche lazos con la potencia asiática antes de asumir la presidencia de turno de la Unión Europea (UE), durante el segundo semestre de 2023.
De hecho, Moncloa ha aclarado a este periódico que la bilateral entre Sánchez y Xi se centrará en cuestiones de geopolítica "y temas de interés estratégico", como las tensiones en el Indopacífico, que preocupan a Pekín y que ya habrá abordado con Biden este lunes. En ese sentido, las relaciones entre España y China, en esta ocasión, ocuparán un espacio menor en la agenda.