Hacienda desnuda a Luis Medina: multiplicó por 400 sus ingresos tras el pelotazo de las mascarillas

Estos datos figuran en el sumario de la causa, al que ha tenido acceso EL ESPAÑOL. En él, se investiga al hijo de la exmodelo y socialité Naty Abascal y a su socio, Alberto Luceño, por los delitos de estafa agravada, blanqueo de capitales y falsedad documental.

La investigación, actualmente en manos del Juzgado de Instrucción número 47 de Madrid, fue iniciada en noviembre de 2020 por parte de la Fiscalía Anticorrupción. A petición del Ministerio Público, la Agencia Tributaria proporcionó los datos de las cuentas bancarias de los dos investigados. Y en ellas se puede constatar el gran beneficio que les reportaron estas operaciones durante la etapa más dura de la pandemia, en los meses en los que los fallecidos por coronavirus se contaban por centenares cada día, la población permanecía encerrada en sus domicilios y la escasez de material sanitario era patente en todas las administraciones de España. 

Por lo que respecta a Medina, mientras que en el año 2019, el volumen total de entradas en sus cuentas bancarias ascendía a 5.379,02; al año siguiente, la cifra se incrementaba hasta los 2.126.727,25 euros. Es decir, 395 veces más que en el ejercicio económico anterior.

Lo mismo ocurre con Luceño. Éste recibió en sus 13 cuentas bancarias un volumen de entradas por valor de 570.646,06 euros en 2019. Sólo doce meses después, los datos de la Agencia Tributaria acreditan que había ingresado más de 5 millones de euros. 

Contra ambos empresarios se querelló hace apenas una semana la Fiscalía Anticorrupción, acusándoles de "inflar" el precio de varios contratos sanitarios (para guantes, test contra la Covid y mascarillas). Lo hicieron "de común acuerdo y con ánimo de obtener un exagerado e injustificado beneficio económico", para luego entregar al consistorio material defectuoso o que no cumplía las estándares acordados.

Casi 11 millones

En total, por todo el encargo, la Empresa de Servicios Funerarios y Cementerios de Madrid S. A., participada al 100% por el Ayuntamiento de Madrid, pagó, en la peor etapa de la pandemia, casi 11 millones de euros de dinero público.

Medina habría cobrado unos 900.000 euros como comisión, a razón de un dólar por cada mascarilla entregada al consistorio. Su socio, en total, unos cuatro millones de euros por los tres contratos. E, incluso, este último habría ocultado a Medina que su comisión era varias veces superior, haciéndole creer que ambos recibirían cantidades idénticas.

Además, ambos usaron, supuestamente, documentos falsificados para justificar estos abultados ingresos en sus entidades bancarias y, con la compra de bienes de lujo como un barco o varios coches deportivos, habrían tratado de reintroducir este dinero en el circuito legal.

Embargo de bienes

Son esos bienes los que, en el caso de Medina, el juez Adolfo Carretero no ha podido embargar. Al proceder a ello, el banco ha comunicado al magistrado que el aristócrata tiene menos de 250 euros en sus cuentas bancarias. Concretamente, 247,26.

Velero que adquirió el empresario ese mismo año. Gtres

Y tampoco contaba ya con los dos bonos bancarios por valor de 400.000 euros que también adquirió tras la supuesta comisión que obtuvo por esos contratos.

Una vez admitió a trámite la querella de la Fiscalía Anticorrupción contra Luis Medina y su socio, Alberto Luceño, el juez Carretero decidió imputar a ambos. Y una de las primeras decisiones que tomó fue la de embargarles dichos bienes de lujo: el velero Feria que compró Medina, así como los coches deportivos, los relojes Rólex y un piso en Pozuelo (Madrid) que adquirió Luceño.