"Más equipos. Más soldados. Más capacidad". Las Fuerzas Armadas continúan fortaleciendo la misión de la que forman parte en Letonia al amparo de la OTAN, y lo hacen con un despliegue nunca visto hasta el momento: enviando 6 de los obuses autopropulsados M109 A5 del Ejército de Tierra. Es la primera vez que España despliega un elemento de artillería pesada fuera de sus fronteras.
Estos vehículos llegaron a la base de Adazi, en Letonia, este miércoles, tras desembarcar en el puerto de Riga. Allí se integrarán en el batallón multinacional de los aliados. La decisión forma parte de la estrategia conjunta que busca fortalecer las misiones defensivas "y preventivas" en los países de la región, apuntalando la seguridad en esta zona tras la invasión perpetrada por Rusia en Ucrania.
Las fuerzas españolas ya suman la cifra de 510 efectivos, en el llamado eFP Battle Group, cuya traducción es Presencia Avanzada Reforzada. El trabajo de los militares en el terreno comprende operaciones tácticas en grupos de combate que la OTAN impulsó después de que el Kremlin decidiera invadir la península ucraniana de Crimea, en el año 2014.
Artillería más potente
Los M109 A5, de fabricación estadounidense, son la artillería más potente nunca desplegada fuera de nuestras fronteras. A su vez, es el elemento de estas características más potente con el que cuentan las Fuerzas Armadas. Pertenecen al Regimiento de Artillería de Campaña nº11, con base en la localidad de Castrillo del Val (Burgos).
Según los datos que figuran en el espacio virtual del Ejército de Tierra, cada uno de los M109 A5 tiene un calibre de 155 mm y un peso total de 24,5 toneladas. Sus cañones se alargan por más de 6 metros, y alcanzan una velocidad máxima de 56 kilómetros por hora.
Su autonomía es de 345 kilómetros sin repostar y sus disparos alcanzan los 30 kilómetros de distancia. Son capaces de lanzar 6 proyectiles por minuto, y normalmente cuentan con el cometido de apoyar con acciones de fuego ACA a las unidades de las brigadas pesadas.
El destacamento español ya cuenta en el campamento de la localidad de Adazi con seis carros de combate Leopardo y 15 blindados Pizarro, destinados allí desde hace meses al servicio de las fuerzas de la Alianza Atlántica. Es la primera medida de escalada bélica -"defensiva y preventiva" que se toma después del envío, este fin de semana, una donación a Ucrania de 20 toneladas de material sanitario y equipos militares de protección en dos aviones A400M del Ala 31 del Ejército del Aire.
Actualmente, España cuenta con unos 800 militares en misiones de la OTAN en la frontera con Rusia. A las tropas desplegadas en Letonia -que ahora se fortalecerán- hay que sumar las del Ejército del Aire para vigilar su espacio aéreo. Dentro de la Policía Aérea del Báltico, España aporta cuatro cazas Eurofighter en Bulgaria y 130 soldados.
Ejercicio en Noruega
No es el único movimiento de la OTAN en el marco del refuerzo de sus misiones en la franja del Este, en el área de influencia de Moscú. Este lunes, 30.000 soldados de la OTAN, entre ellos un contingente del Ejército de Tierra español, se desplegaron en Noruega para participar en unas maniobras planificadas desde hace meses, pero que coinciden en plena invasión de Ucrania por parte de Rusia, y en medio de la escalada de tensión entre Occidente y el Kremlin.
Nuestra Fuerzas Armadas aportan a este ejercicio, denominado "Cold Response 2022", un contingente de 250 militares procedentes de la Brigada Guadarrama XII, ubicada en la base militar de El Goloso, al norte de Madrid.
Hace días que partieron hacia el norte de Europa, en dirección al Ártico, para aclimatarse antes de iniciar las exigentes maniobras junto al resto de soldados. Además de sus tropas, España aporta una decena de carros de combate Leopardo y seis blindados Pizarro.
De ese modo, la OTAN saca músculo mientras Putin continúa con los bombardeos a Ucrania, incluso en ciudades muy cercanas a las fronteras de miembros de la Alianza.