Unos 7.000 ciudadanos marroquíes que accedieron irregularmente a Ceuta entre la madrugada del lunes y la tarde del miércoles han abandonado ya la ciudad autónoma, bien por su propia voluntad o tras ser expulsados por el Ejecutivo español.
Así lo ha anunciado la Delegación del Gobierno en Ceuta, que estima que fueron entre 8.000 y 10.000 personas las que consiguieron entrar. En los momentos de mayor presión, las autoridades calculan que llegaron bordeando el espigón marítimo del Tarajal hasta 90 personas por minuto.
Las Fuerzas de Seguridad comenzaron el jueves, una vez extinguidos los intentos de entrada, a localizar personas migrantes por las calles con el objetivo de expulsar a los adultos, a quienes el Reino alauita se ha comprometido a admitir en grupos de hasta medio centenar de personas para los que abre la frontera cada dos horas. En paralelo, se ha activado la gestión de atención a los menores.
Estos niños, que se encuentra en Ceuta solos, están siendo agrupados entre las naves habilitadas en los polígonos del Tarajal, los módulos prefabricados del albergue provisional de Piniers y el Polideportivo Santa Amelia.
De hecho, el último traslado se produjo cerca de la medianoche de este viernes. El Gobierno ceutí desplazó a un grupo de 250 menores marroquíes al polideportivo cubierto local Santa Amelia, acondicionado para acoger a los niños y poder descongestionar la nave industrial del Tarajal, a la que fueron conducidos en un primer momento y desde donde ya salieron el pasado miércoles otros 230 menores rumbo al albergue provisional en la zona de Piniers.
Este pabellón de Santa Amelia ya había sido utilizado durante los primeros meses de la pandemia de la Covid-19 para acoger a los menores marroquíes que estaban en las calles de la ciudad, principalmente en la zona del puerto, y que no querían dormir en el centro de acogida.
El Gobierno ceutí tiene identificados a 438 menores y ha anunciado que va a continuar el proceso de identificación en los próximos días con los aproximadamente 800 menores que finalmente fueron los que entraron en Ceuta de forma irregular en las jornadas del lunes y el martes.
Una víctima más
Este sábado, además, se ha conocido el fallecimiento de un joven inmigrante marroquí que resultó herido al caer desde unos 10 metros en el puerto de Ceuta. El fallecido, del que aún no se ha facilitado la edad, ingresó anoche en estado grave en el Hospital Universitario de la ciudad.
Según informaron fuentes policiales, el suceso se produjo en el muelle de la Puntilla, en las inmediaciones de la estatua del Hércules, donde el inmigrante se encontraba junto a otros compañeros. Por causas que se desconocen, el joven se precipitó al vacío, tras lo cual acudieron hasta la zona agentes de la Policía portuaria y de la Guardia Civil.
Una ambulancia del 061 se encargó de estabilizar al accidentado en la misma zona antes de ser trasladado hasta el hospital, donde finalmente ha fallecido tras sufrir un fuerte traumatismo craneal. En esa zona del puerto se suelen acumular inmigrantes a la espera de poder llegar a uno de los barcos que están atracados en el puerto ceutí para llegar a la Península.