Casi un año después de deponerle de su cargo, la directora general de la Guardia Civil, María Gámez, comparecerá este jueves en el Congreso de los Diputados para dar explicaciones, entre otros asuntos, del cese fulminante del coronel Diego Pérez de los Cobos al frente de la Comandancia de la Benemérita en Madrid.
Las peticiones realizadas por partidos como el PP, Vox o Ciudadanos, según relatan fuentes de estas formaciones, surten por fin efecto. Gámez acudirá a la Cámara Baja a responder a todas las fuerzas parlamentarias en el marco de la Comisión de Interior.
Habrán pasado ya 300 días desde aquella polémica, una de las primeras en el seno de la Benemérita, en los primeros compases de la pandemia y pocos meses después de que Gámez se hiciese con el cargo al frente de la Guardia Civil.
Esta noticia se conoce tan solo unos días después de que el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, decidiera no conceder el ascenso a general al coronel al que defenestró hace diez meses de su cargo. Su nombre, según ha podido saber EL ESPAÑOL, figuraba entre los tres primeros puestos de la quincena de aspirantes a los nuevos ascensos en el seno del Instituto Armado.
Sin embargo, una vez llegó a la mesa del máximo responsable del ministerio ese elenco de nombres, el reputado mando no fue uno de los escogidos.
Dimisión del DAO
El cese de De los Cobos propició un seísmo en cadena que acabó con la renovación casi al completo de la cúpula del cuerpo. Tras la decisión de Interior, Laurentino Ceña, Directora Adjunto Operativo (DAO), dejó su cargo tras negarse a cesar al coronel.
El DAO se marchaba al no poder aguantar más "las injerencias políticas, tanto en ascensos, medallas y nombramientos". Antes de abandonar su cargo, reunió a los generales del cuerpo y les pidió responsabilidad para defender la institución. Les dijo también que "nunca se había visto algo así".
También sobre esta y otras polémicas se presupone que dará cuenta Gámez en el Congreso a finales de esta semana.
El cese cese
"Es una investigación delicada para el Gobierno y tenemos que conocer lo que la Guardia Civil está entregando a la jueza". Éste fue el motivo que la directora general del instituto le dio el pasado 24 de mayo al coronel de los Cobos al comunicarle la decisión "de la cúpula del Ministerio" de cesarle de manera fulminante como jefe de la Comandancia de Madrid.
El año de la pandemia estuvo marcado de manera indudable en el seno de la Benemérita por ese cese. Fue relegado de su puesto de forma fulminante por "no informar del desarrollo de investigaciones y actuaciones de la Guardia Civil".
Las pesquisas sobre las que se le inquiría las estaban realizando sus subordinados. Los agentes a cargo del coronel ejercían como comisión de Policía Judicial por orden de la juez Carmen Rodríguez Medel y respondían ante ella y nadie más de sus averiguaciones.
El objetivo último de aquellas indagaciones de las que el coronel se negó a dar cuenta a nadie más que a la jueza encargada de investigar el caso era tratar de dilucidar las posibles responsabilidades del Gobierno en la organización de las manifestaciones del 8-M en los albores de la pandemia.